El retroceso del Producto Interno Bruto (PIB) de 0.2% en el primer trimestre de 2019 respecto al trimestre inmediato anterior implica una desaceleración de la economía que estacionalmente se da en el primer año de gobierno de cada sexenio y que impacta principalmente en una menor generación de empleos.
Al inicio de un nuevo sexenio, el gobierno tiende a reducir su gasto como parte de un proceso de ajuste a los nuevos proyectos de la administración entrante. Este ajuste es especialmente mayor en el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, quién ha puesto en marcha una serie de recortes importantes al gasto público, así como el retraso en la marcha de una serie de proyectos de infraestructura y obras públicas, lo que afecta el crecimiento económico en los primeros meses de la actual administración.
El principal impacto de este menor crecimiento de la economía ha sido en la generación de empleos. Durante el primer trimestre del año se crearon 269 mil empleos en el sector formal de la economía, cifra 27% inferior a los 368 mil puestos creados en el mismo periodo del año anterior. Esto trajo como consecuencia que la tasa de desocupación se ubicará en 3.6% de la población económicamente activa en marzo, la tasa más alta desde diciembre de 2016.
Adicionalmente cabe destacar que en los primero meses del año hubo una serie de hechos que impactaron la actividad económica del país, como fue el desabasto de gasolinas, así como los bloqueos al transporte ferroviario. Junto con lo anterior, la economía mundial también ha entrado en una fase de menor crecimiento, lo cual también está afectando a nuestro país, en particular por lo que se refiere al comercio internacional. Las exportaciones de México cayeron 1.2% a tasa anual en marzo pasado, el primer retroceso en casi dos años y medio.
Tomando en cuenta lo anterior, se espera una recuperación del comercio internacional de México en particular con Estados Unidos, nuestro principal socio comercial. Asimismo en lo que resta del presente año se esperaría también una reactivación del gasto público, especialmente durante el segundo semestre, lo que podría favorecer la recuperación de la actividad económica, pese a ello los especialistas del sector privado coincidieron en señalar un bajo crecimiento en el primer año de gobierno de López Obrador de 1.5%.
Texto y foto: El Universal