Padres de familia de la Escuela Secundaria Técnica Número 58 de San Haroldo realizaron un plantón para manifestar a la opinión pública que, debido a que el plantel no cuenta con internet ni recursos para pagarlo, no se les dio la opción para decidir entre tener clases presenciales o a distancia.
“En la hoja que nos entregaron solamente nos preguntaron si teníamos internet en casa”, dijeron los inconformes, mientras que otros afirmaron que sí les dieron la opción pero que les pidieron que borren la opción de “a distancia” porque la escuela no tiene internet.
Ante los reclamos, el maestro Ramón Díaz Cetina, director de este plantel que se encuentra en el municipio de Kanasín, salió a dialogar con los padres de familia a quienes explicó la situación, y que inclusive en el curso pasado los maestros pagaron de su bolsa el costo del internet, pero este año subió mucho el precio del servicio por lo que ya no están en disposición de seguir haciéndose cargo del pago.
Sin embargo, los padres de familia no quedaron conformes y continuaron su protesta, que dijeron se prolongará hasta el momento en el que se tome una decisión al respecto; inclusive señalaron que estaban dispuestos a apoyar en los gastos.
“Ya aportamos la cuota supuestamente voluntaria de 200 pesos que nos pidieron por alumno, si no, no los inscribían, pero resultó que ese dinero se empleó para comprar gel y sanitizantes, no para el internet”, contó Carlos, uno de los padres de familia que se dieron cita a las puertas del plantel en demanda de una solución al tema, ya que no desean que sus hijos acudan a tomar clases de manera presencial, pues consideran es un riesgo debido a que en Kanasín “el Covid está en todos lados y nuestros hijos no son para hacer experimentos”, afirmaron.
En un recorrido realizado por el equipo de Peninsular Punto Medio se visitó la escuela Emilio Portes Gil, donde la semana pasada los maestros y padres de familia manifestaron que no era posible reiniciar con las clases presenciales porque el plantel no tenía luz ni agua, además de que los salones fueron vandalizados y hay uno en el que incluso se corre el riesgo de que el techo pueda caer en partes.
Al respecto, la directora de este plantel, la maestra Miriam Sierra Rodríguez, destacó que a partir de la publicación de este periódico, el martes la Secretaría de Educación del Gobierno del Estado de Yucatán (Segey) envió personal para reestablecer el servicio de agua potable y energía eléctrica, pero no se instalaron lámparas, no se arreglaron los ventiladores, ni se impermeabilizaron los techos como se había acordado.
“Cuando preguntamos por qué no regresaron los trabajadores, nos comentaron que muchas escuelas están en situación similar”, comentó la docente, quien destacó que en este primer día de labores solo asistieron 13 alumnos que eligieron clases presenciales y que regresarán hasta el viernes. “El resto de un total de 335 tomarán clases a distancia los martes, miércoles y jueves”, detalló.
En este caso los grupos con más alumnos en modalidad presencial fueron los de quinto grado, con un máximo de 4 alumnos por salón, mientras que en el resto de los grados asistió solo uno.
Como parte del regreso a clases presenciales, desde primera hora se pudo observar una larga fila de alumnas y alumnos que esperaban fuera de la escuela primaria Héroe de Nacozari, ubicada en el barrio de La Mejorada, para ingresar a este plantel con estrictos protocolos y medidas sanitarias. Según informó la directora de este plantel, quien prefirió omitir su nombre, la matrícula es de 190 alumnos; sin embargo, fueron 130 los que retomaron sus clases de manera presencial, el resto lo hará a distancia.
En la Secundaria José Emilio Vallado Galaz de la colonia Francisco I. Madero, se observó que el proceso de ingreso, aunque fue uno solo, fue muy ordenado. “No fueron tantos los niños que vinieron, tenemos espacio para acomodarlos hasta en áreas verdes”, dijo la maestra entrevistada quien comentó que, en un solo grado, no especificó cuál, de 280 en la primera jornada acudieron 45 alumnos.
Finalmente, en la escuela David Vivas Romero, ubicada en la Avenida Cupules, en la colonia Reparto Dolores Patrón, de manera muy cuidadosa se aplicaron las medidas de seguridad en los filtros sanitarios para ingresar al plantel, donde se observaron a niños llorando en este primer día de clases. “Todos los papás estamos preocupados, pero tenemos confianza en los maestros”, dijo una de las madres de familia, quien destacó que uno de sus hijos tomará clases desde casa y su hermanita que cursará el primer grado, lo hará de manera presencial.
Texto y foto: Manuel Pool
