Editorial de Peninsular Punto Medio

El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, que hoy da el banderazo de salida al primer recorrido del Tren Maya desde Campeche a Cancún, pasando por Mérida, usó ayer una de sus facultades constitucionales: designó a Lenia Batres Guadarrama como ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.

Con ello, queda claro que la familia Batres Guadarrama se consolidó como una de las más fuertes al interior de Morena y la Cuarta Transformación, pues Martí es Jefe de Gobierno y Valentina Valia se desempeña como diputada local por Morena en la 11a. Legislatura del Congreso de la Ciudad de México.

¿Hay delito en ello? No, pero sin duda ya es objeto de comentarios en contra de analistas y militantes de la oposición.

El presidente de la República tomó la decisión luego de que, tras dos sesiones en la Cámara de Senadores, no se llegó a una resolución sobre los tres perfiles propuestos para ocupar el cargo de ministro de la SCJN que dejó Arturo Zaldívar.

Las otras candidatas fueron: María Eréndira Cruzvillegas Fuentes y Bertha María Alcalde Luján, esta última hermana de la secretaria de Gobernación, María Luisa Alcalde.

Tras la designación destacan dos mensajes de felicitaciones a la nueva ministra:

“Felicidades a @LeniaBatres por su designación como ministra de la SCJN. Sé que hará un trabajo honesto, defenderá la justicia y velará por los intereses del pueblo y de la nación”, escribió la Dra. Claudia Sheinbaum Pardo.

“Mis felicitaciones a la ministra @LeniaBatres. Con su llegada se consolida la paridad de género en la #SCJN. Estoy seguro de que impulsará una agenda progresista en beneficio de los derechos humanos del pueblo de México”, escribió el ministro retirado Arturo Zaldívar.