El expresidente de Estados Unidos y precandidato republicano Donald Trump tendrá la última palabra en el debate electoral de la próxima semana en Atlanta (Georgia), con el actual presidente, el demócrata Joe Biden, anunció ayer jueves la cadena CNN, organizadora del evento.
Tras el lanzamiento de una moneda al aire, la campaña de Biden ganó el derecho de elegir la posición del podio en el debate o el orden de las declaraciones finales, y optó por la primera opción.
Los demócratas pidieron que su candidato debata desde el lado derecho de la pantalla de televisión, mientras que el podio de su rival republicano estará en el lado izquierdo.
Luego, la campaña de Trump solicitó que el expresidente pronuncie la declaración final del debate, lo que significa que Biden será el primero en terminar su intervención.
El debate, que será emitido el 27 de junio por la CNN, será el primero de los dos cara a cara televisados que habrá entre Biden y Trump antes de las elecciones del 5 de noviembre.
El debate se celebrará en Atlanta, durará 90 minutos y estará moderado por los periodistas de la CNN Jake Tapper y Dana Bash.
Habrá dos pausas comerciales durante las cuales el personal de campaña no podrá interactuar con su candidato.
Los equipos de Biden y Trump han aceptado también que los micrófonos estén cerrados durante todo el cara a cara excepto para el candidato al que le corresponda hablar.
Tampoco se les permitirá en el escenario a los contendientes accesorios ni notas escritas previamente, si bien recibirán un bolígrafo, una libreta y una botella de agua.
Biden pasará los próximos días en la residencia presidencial de Camp David (Maryland), a las afueras de Washington, para practicar y estar listo.
Por su parte, Trump lleva unas semanas preparándose en reuniones con algunos senadores y otros políticos que suenan como vicepresidenciables del republicano.
Será la primera vez que se enfrentan un presidente en activo y un expresidente en un debate electoral.
Texto y foto: EFE