¿Quién nos conoce realmente bien? Lo lógico es pensar que son nuestros familiares más cercanos o nuestras parejas, pero lo cierto es que si consideramos el volumen de información puro y duro y la capacidad de procesar semejante cantidad de datos, quien realmente sabe de nosotros al dedillo es Google, Facebook y similares. Quien tenga una cuenta en cualquiera de estos servicios sabe que paga el peaje en la sombra de entregar parte de su privacidad a estos descomunales servidores que luego procesarán esta información para ofrecernos publicidad a medida. Y hacer caja con ello, claro. Pues bien, en esta carrera por ofrecer un servicio cada vez más a medida de las necesidades del usuario, Google presentó su Assistant, un sofisticado sistema de inteligencia artificial con el que podemos comenzar a imaginar cómo será un futuro cada vez más cercano.Hasta la fecha, los asistentes de voz del móvil se limitaban a ejecutar órdenes puntuales y directas, del tipo “llama a” o bien, “despiértame a las 7h”, pero la evolución natural de estos sistemas pasa por la inteligencia artificial y ofrecer al usuario una información mucho más rica y basada en el contexto. En la presentación del Pixel, uno de los apartados estrella de la misma se lo llevó el Assistant y pudimos ver todo su potencial: con este sistema, el usuario ya no se limita a ejecutar órdenes estancas, sino que el cerebro artificial considera el contexto de la conversación para ofrecer una respuesta más precisa. Así, si preguntamos al asistente “cuánto tardaré en coche en ir a ‘x’”, y tras obtener la respuesta continuamos con un “¿y dónde puedo cenar ahí?”, Assistant comprende que nos estamos refiriendo al lugar de la primera pregunta y de esta manera hila la conversación.
En la presentación de Google nos mostraron que esto era sólo el comienzo, pero ya en ese punto el usuario podía reservar mesa, apuntar la cita en la agenda y avisar a los comensales sin mover un solo dedo. Y aunque nos pueda sorprender el saber todo el potencial que recibirá nuestro móvil en poco tiempo, en realidad se trata de sólo el comienzo. Los asistentes basados en la inteligencia artificial no se limitarán a darnos un buen servicio desde el móvil, sino que la siguiente batalla se libra en el salón de nuestra casa. Amazon fue el primero en acertar con Echo, un altavoz en permanente escucha al que podremos dar todo tipo de instrucciones, desde ponernos un determinado tipo de música, darnos el parte de noticias, hasta pedirnos un taxi o reservar una mesa en un restaurante. Google presentó ese mismo día Home, un dispositivo prácticamente idéntico al de Amazon, pero aprovechando la descomunal base de datos del buscador. Por si todo esto fuera poco, se rumorea también que Apple estaría planeando llevar a su asistente Siri a un altavoz similar en los hogares.
Aunque todavía queda mucho camino que recorrer, en especial en lo que respecta al reconocimiento de voz, lo cierto es que los grandes del mercado están apostando fuerte para que en un futuro que está a la vuelta de la esquina vayamos acompañados de un asistente invisible con el que podremos ejecutar órdenes empleando el lenguaje natural. Se trataría de una realidad muy cercana a la que vimos en su día con la película ‘Her’.