El alcalde José Cortés Góngora sufrió un revés cuando el Tribunal de Justicia Fiscal y Administrativa del Estado de Yucatán emitió una suspensión contra el munícipe y su proyecto privatizador en el servicio de recolecta de basura.
Con lo anterior, se validó la legitimidad de la concesión de los recolectores, que está vigente hasta diciembre de 2018, cuando entre en funciones el nuevo gobierno municipal, y otorgó una suspensión contra todos los actos previos, actuales y futuros realizados por el Ayuntamiento de Progreso en torno a su plan de privatizar el servicio a una empresa foránea.
De esta manera, el Ayuntamiento y el alcalde sufren un revés en la lucha jurídica que se disputa en torno a la basura, pues la Comuna ha buscado quitarle el servicio a los recolectores locales y ahora el tribunal los reconoce como concesionarios.
Según el secretario de Actas del Sindicato de Recolectores de Basura de Progreso, Francisco Rossel, estas son buenas noticias, pues el servicio seguirá en manos de los recolectores locales y por ahora se evita que sea entregado a manos fuereñas que solo buscan lucrar y hacer negocio con las autoridades en turno.
Indicó que desde que tomó el poder, el alcalde José Cortés ha pretendido hacer a un lado a los recolectores de Progreso.
“Nosotros tenemos una concesión vigente hasta diciembre de 2018, que el señor no quería respetar”, dijo-
“La concesión fue otorgada por el mismo Ayuntamiento y esta Comuna pretendía desconocernos, pero el Tribunal ha analizado el caso y ha emitido una suspensión contra los actos realizados por la autoridad municipal”, agregó.
“Aunque no es un fallo absoluto, es un primer paso en la lucha que llevan contra el Ayuntamiento turquesa, debido a que el Tribunal los ha reconocido como los concesionarios del servicio”, destacó.
Recordó que fue en la administración 2010-2012 cuando el Ayuntamiento les otorgó la concesión para realizar la recolecta de basura en todo el municipio.–José Luis Chavarría.
