Aconsejan prepararse para la muerte

El Arzobispo de Yucatán asegura que sólo en el sueño eterno es como se logrará una nueva vida

El Arzobispo de Yucatán, Monseñor Gustavo Rodríguez Vega, pidió ayer estar preparados para el sueño eterno, porque sólo de esa manera Dios podrá darnos una nueva vida. En el quinto domingo de Cuaresma,  el Prelado yucateco criticó a quienes creen en la Santa Muerte y viven de prodigárse felicidad, olvidando su fe religiosa.

Rodríguez Vega entregó su acostumbrada homilía, hablando sobre los distintos aspectos que impactan al cristiano y a la muerte. “Yo soy la resurrección y la vida”, citó a San Juan.

Rodríguez Vega hizo una alabanza por los testimonios de los cristianos que creen y demuestran su fe en Cristo. En contraposición, expresó que hay muchos cristianos que celebran fervorosamente la pasión del Señor, pero no participan de la Pascua, que es la resurrección, por lo que invitó a todos los creyentes a postular con mucha mayor intención el valor de su fe participando y celebrando la Pascua.

El dirigente de los católicos en Yucatán expresó en su texto que en este tiempo se vive en la determinación de ser redimido por la resurrección de Jesucristo, porque estar en pecado es estar lejos de la gracia, pero ser perdonado es la resurrección al lado del Señor, recalcó.

Rodríguez Vega habló del milagro de Jesucristo al redimir a Lázaro, expresando que al iniciar la Cuaresma “polvo eres y en polvo te convertirás; sin embargo, la vida eterna es para darlos la respuesta a que nosotros también estaremos alabando al Señor”, puntualizó.

El Arzobispo de Yucatán criticó a quienes han tomado otras formas y otras creencias y establecen que son cristianas y recalcó: “Mucho más penoso es que haya tantos adoradores de la Santa Muerte y que piensen todavía que son cristianos. Hasta creen que todo se arregla poniendo de un lado una imagen de San Judas y del otro una imagen de nuestra Señora de Guadalupe. ¡Qué enorme ofensa para Dios y para la santísima Virgen y San Judas”, dijo.

“Ese culto es totalmente contrario a nuestra fe cristiana depositada en el Dios de la vida, el cual resucitó a Jesús y nos resucitará también a nosotros. Ese culto es común entre los que se dedican al crimen organizado y entre todos los que han perdido el respeto a la vida humana; sin embargo aún ellos pueden resucitar a la vida de la gracia de Dios si se arrepienten y cambian sus actitudes”, subrayó.– José Cortazar Navarrete

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