El acuerdo fortalecerá la procuración y procesamiento de tejidos en nuestra entidad, al permitir que el 50% del material donado sea procesado y devuelto al estado para su uso en hospitales sin costo para las y los pacientes.
Como parte del Programa “Tejiendo vidas” se firmó ayer un convenio de colaboración entre la Secretaría de Salud de Yucatán y el Banco de Hueso del Estado de México, en materia de trasplantes y aprovechamiento de tejido osteotendinoso y membrana amniótica.
En el evento, realizado en el Salón de la Historia del Palacio de Gobierno, se entregó un reconocimiento a María Josefina Zapata Espada, madre de un donante.
De esta manera, todo el tejido que se recolecte en Yucatán por concepto de donación se enviará al Estado de México para su tratamiento, y se retornará un 50% ya esterilizado y listo para su uso en el Hospital Regional de Alta Especialidad de la Península de Yucatán, Hospital O’ Horán y el Imss Bienestar, sin costo para los pacientes, lo que fortalecerá la autosuficiencia terapéutica y reducirá gastos hospitalarios.
El director del Centro Estatal de Trasplantes del Estado de Yucatán (Ceetry), Jorge Martínez Ulloa Torres, manifestó que la firma de este convenio es una valiosa oportunidad para seguir avanzando en materia de donaciones y trasplantes y para sensibilizar sobre el profundo valor humano, la esperanza y la vida que existe detrás de cada donación y cada trasplante.
Luego de destacar que es la primera vez que un gobernador dirige la mirada hacia el programa de trasplantes en el estado, el funcionario dirigió unas palabras a los pacientes transplantados con éxito que estuvieron en la ceremonia.
“Detrás de cada trasplante, hay una historia de lucha de esperanza y de amor que nos recuerda porque vale la pena todo este esfuerzo”, subrayó.
De esta manera mencionó el caso de Fátima, quien hace 12 años fue la primera paciente en recibir un riñón cadavérico en el Hospital O’ Horán y hoy es una enfermera comprometida con su labor; asimismo, Vanessa, de 30 años de edad, que se encuentra en lista de espera para un retransplante. Aún no se ha podido encontrar donante compatible.
También mencionó al abogado Policarpo, maestro de la Facultad de Derecho de la Uady, quien fue trasplantado de hígado un proceso de mucha complejidad, que es posible efectuar en Yucatán; pero también dedicó un espacio en su intervención para las niñas niños y adolescentes que se encuentren en la lista de espera, con la esperanza de tener una oportunidad más para vivir, jugar, regresar a la escuela y crecer.
Un ejemplo de éxito, dijo, es Yamilet, de 17 años, quien hace dos meses, como última opción, recibió un transplante de donador calavérico y hoy está con vida salud y esperanza, mientras que a Valentina, bailarina de ballet de 9 años de edad, su mamá le donó su riñón. Caso similar al de María José, quien hace 11 años recibió de su tía una donación y hoy acaba de concluir sus estudios de secundaria. También estuvieron acompañando al gobernador, Jonathan y su mamá: él recibió un implante de hueso y evitó una dolorosa tragedia como lo es la amputación de un miembro.
El Dr. Martínez Ulloa Torres señaló que Yucatán se ha consolidado como entidad ejemplar en materia de trasplantes, y es punta de lanza con el único banco de córneas y único programa de transplante hepático en el sureste.
“Yucatán aparece resaltado en el mapa nacional por su intensa actividad en donación y trasplantes, somos el sexto lugar a nivel nacional en transplante de órganos de acuerdo al reporte del boletín estadístico emitido por el Centro Nacional de Transplantes”, subrayó el especialista, quien recordó que en lo que va de este primer año de administración, en el estado se han llevado a cabo 117 transplantes de órganos y tejidos.
“La tasa de donantes por cada 1000 habitantes se elevó a 4.7%, superando la media nacional y ese 2025 ya hemos superado la cifra del año anterior”, abundó.
Mencionó que Yucatán es un estado noble que envía órganos y tejidos a otros puntos del país, lo que se ha favorecido con acuerdos como el que se tiene con el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de Mérida, lo que permiten un tráfico ágil, seguro y expedito de los órganos.
“En cuanto a la cultura de donación, hemos fortalecido vínculos con la comunidad universitaria, con los scouts de Yucatán, promoviendo la conciencia sobre el valor de donar y salvar vidas, y paralelamente hemos implementado un programa con medicamentos inmunosupresores que garantizan que los pacientes ya trasplantados no pierdan sus injertos por desabasto”, agregó.
Otro de los aspectos importantes que se trabaja con los hospitales de la entidad es garantizar el suministro oportuno de insumos esenciales como las soluciones para preservar el estado de los órganos y tejidos, de manera que ninguna donación se cancele por falta de este recurso
En el ámbito jurídico, con la Fiscalía General del Estado se trabaja en coordinación para que los trámites ministeriales se realicen con certeza jurídica, transparencia y un trato profundamente humano hacia quienes desean donar los órganos de su familiar fallecido.
En el ámbito académico, el Ceetry publica de manera regular la experiencia científica generada en el estado, por ejemplo, trasplantes pediátricos y en población con VIH.
Finalmente, Martinez Ulloa Torres habló de los logros que de manera conjunta se han obtenido en Yucatán en materia de trasplantes. En este sentido recordó que en el Issste hace dos meses se reinició el programa de transplante renal y se está en vías de ampliar la licencia para trasplante hepático y cardíaco, mientras que en la UMAE del Instituto Mexicano del Seguro Social el año pasado se efectuaron 57 trasplantes constituyendo un récord histórico para un solo hospital.
En su intervención el gobernador Joaquín Díaz Mena resaltó que este convenio consolida una salud pública más justa, moderna y humana, al permitir que quienes padecen fracturas graves, quemaduras o tumores óseos puedan recibir atención sin tener que salir de la entidad. “Donar órganos no es perder algo, sino multiplicar la vida”, externó.
En presencia de la secretaria de Salud de Yucatán, Judith Ortega Canto, el Gobernador recordó que en la entidad no existía infraestructura para el procesamiento de tejidos osteotendinosos o membranas amnióticas, lo cual limitaba la atención de pacientes con fracturas graves, tumores óseos o quemaduras severas que necesitaban injertos biológicos.
Con este convenio, afirmó, se abre la puerta a una nueva etapa de esperanza para cientos de familias que enfrentan estos padecimientos.
“En el Gobierno que representamos, la salud no se ve como un privilegio, sino como un derecho. Por eso estamos fortaleciendo los hospitales, ampliando los servicios especializados y garantizando atención digna para quienes lo necesitan. La donación y el trasplante de órganos son actos de amor y por eso, en cada hospital y en cada comunidad, debemos seguir promoviendo la cultura de donación altruista”, añadió.
Previo a la firma del Convenio de Colaboración en Materia de Procuración, Procesamiento, Almacenamiento y Suministro de Piel, Tejido Musculoesquelético y Tejido Amniótico en la que el Gobernador fungió como testigo de honor, el mandatario explicó que su administración seguirá fortaleciendo la salud y fomentando una cultura de vida, de empatía y de conciencia, porque donar órganos no es perder algo, sino multiplicar la vida.
Por su parte, la secretaria de Salud del Estado de México, Macarena Montoya Olvera, celebró la firma de este acuerdo como un acto de solidaridad que une a ambas entidades en favor de la donación altruista de tejidos, mientras que la titular de la Secretaría de Salud de Yucatán, Judith Ortega Canto, señaló que se avanza hacia una red de trasplante más sólida y humana.
El evento contó también con la presencia de la directora del Banco de Hueso del Estado de México, Ingrid Marisol Pérez Espejel; el director del Ceetry, Jorge Martínez Ulloa, así como pacientes y familiares de donantes, quienes simbolizan el espíritu de esperanza y vida que impulsa este acuerdo.
Texto y fotos: Manuel Pool




