Por tercer año consecutivo el rancho San Judas Tadeo volvió a arder con todo y sistema de riego. El pastizal seco aunado con los fuertes vientos avivaron el fuego.
La quemazón alcanzó a tostar mangueras del rancho colindante “El Porvenir”.
Las autoridades informaron que en total se quemaron cinco hectáreas entre pasto seco y monte, además cientos de metros de tubería PVC, principalmente en el primer rancho, ubicado en Kinchil.
Asimismo, se incendiaron cítricos en la unidad “Bobadilla”, por camino a Celestún.
–Acom