La tromboflebitis en la pierna derecha que sufre Carlos Darwin Quintero le pone pausa a una carrera que se encontraba en crecimiento.
De ser un jugador cuestionado en sus primeros meses como jugador del América, Quintero se convirtió en un imprescindible para el técnico Ignacio Ambriz.
En el Torneo Clausura 2015, su primero en Coapa, el colombia- no apenas marcó un gol y dio tres asistencias para después iniciar con mejoras en su rendimiento cada semestre.
En el Apertura 2015 marcó seis tantos y sumó otras dos asistencias, además de que consolidó en el cuadro titular, mientras que en la Clausura 2016 acumuló otra media docena de goles y dio tres asistencias.
En el presente Apertura 2016 tenía ya tres goles y dos asistencias, con un rol cada vez más importante no sólo como aliado de Oribe Peralta o Silvio Romero, sino como eje de los avances azulcremas.
Para su infortunio, ahora se le cruza una lesión de complicado tratamiento que lo tendrá marginado por tiempo indefinido. Al menos se perderá lo que resta del semestre sin fecha estimada de regreso.- Excélsior