Confirman recuperación de mujer contagiada por gusano barrenador

La adulta mayor, de 86 años de edad, residente del municipio de Candelaria, es dada de alta del hospital, tras mostrar una evolución favorable

Una mujer de 86 años, residente del municipio de Candelaria, que se infectó con el gusano barrenador ya fue dada de alta, pero propició el cierre de la frontera a la movilización de animales al resto del país.

El Sistema Nacional de Vigilancia Epidemiológica confirmó que la afectada es una mujer de 86 años de edad, habitante del municipio de Candelaria, quien presentó una lesión en la cabeza causada por esta larva parasitaria.

Las autoridades sanitarias confirmaron que la paciente ya fue dada de alta tras mostrar una evolución favorable en su estado de salud. Con ella, suman seis casos humanos a nivel nacional.

El Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria prohibió la comercialización de reses procedentes de Campeche a cualquier otro estado del país, luego de los casi 200 casos del gusano barrenador del ganado, plaga que ya tiene presencia en ocho de los 13 municipios de esta entidad, sobre todo en Candelaria, Escárcega, Champotón y Carmen.

El primer caso humano de miasis por Cochliomyia hominivorax, (gusano barrenador) ocurrió en el municipio de Candelaria, ubicada en la frontera Sur, cerca de los límites con Guatemala.

Los productores ganaderos y el líder local de la Confederación Nacional Campesina (CNC), Luis Humberto Mora Hernández, coincidieron en señalar la falta de vigilancia en la frontera sur propició la infestación de los animales, pues además de reses el gusano ataca a borregos, caballos y perros, así como a los seres humanos.

Mora Hernández aseguró que las autoridades agropecuarias actuaron con lentitud para atacar el problema, además que se redujo el presupuesto para sanidad animal, ocasionando severas afectaciones económicas a los ganaderos, porque ya no se puede movilizar animales fuera de Campeche.

El sector salud exhortó a la población a estar atentos a las heridas en animales y personas, para detectar signos de miasis.

Texto y foto: Agencias