Carlos Pérez
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Llegó el fin de este 2024, es momento de prepararnos a lo que vendrá el próximo, qué nos depara en lo empresarial o como líder de una organización; sin embargo, para hacer un buen plan es necesario primero hacer una pausa y reflexionar lo que sucedió en los 12 meses anteriores, es decir, una reflexión que nos haga saber dónde debemos ajustar o en qué debemos continuar.
La reflexión de fin de año es un ejercicio de suma importancia para los empresarios, nos permite evaluar el desempeño de su empresa de forma verídica y puntual durante los 12 meses transcurridos; les permite identificar las áreas donde fueron exitosos y permite reconocer los esfuerzos realizados que funcionaron bien, así como la toma de decisiones clave que permitieron crecer como empresa en todos los aspectos. Lograr este análisis nos proporciona además de una sensación de logro, también ayuda a fortalecer la visión y misión de la empresa, y con ello lograr una base más sólida de dónde vamos a continuar nuestro camino este 2025.
De igual manera es muy importante hacer notar durante esta reflexión lo que no lograron, identificar los objetivos no alcanzados o las áreas donde tuvimos dificultades y así aprender de los errores. Hacer este análisis sobre estos aspectos permite tomar decisiones más acertadas con información más precisa y ajustar las tácticas que no pusimos en marcha.
Este juicio de reflexión nos ayuda una planificación más estratégica para el próximo año. Al estar al tanto de los éxitos como los fracasos, con ello los líderes empresariales pueden crear metas más adaptadas a la realidad actual de su mercado. Además, es importante mencionar que este análisis no solo se restringe al área financiera, sino que también alcanza la mejora del equipo y la satisfacción del cliente.
Algunos expertos mencionan que debemos reflexionar a fin de año, entre las sugerencias están: 1. Evaluación del área financiera; 2. Analizar el estado operativo; 3. Evaluar la competencia y el mercado; 4. Revisar el equipo humano; 5. Gestión de la marca y la comunicación; 6. Reflexionar el liderazgo; 7. Examinar la cultura y responsabilidad social; 8. Revisar el rendimiento operativo. Estas son algunas de las recomendaciones, pero lo más importante es que SÍ lo hagas. Estimado lector mis mejores deseos en este 2025. Felicidades.
