Sheinbaum Pardo, presidenta de México, defendió este viernes el aumento al impuesto especial sobre refrescos y otros productos altos en azúcar al asegurar que la medida no tiene fines recaudatorios sino de salud pública, ante los altos índices de obesidad y diabetes en el país.
“Esto va acompañado de una campaña de información del gobierno de México de la Secretaría de Salud (…) del efecto que puede tener el consumo excesivo de bebidas azucaradas y comida chatarra (basura). Entonces, viene una campaña. El objetivo no es recaudar dinero sino que se consuma menos”, afirmó la mandataria durante su conferencia de prensa matutina.
La gobernante mexicana sostuvo que el sobrepeso infantil se ha incrementado con base en mediciones recientes del programa federal ‘Vive saludable, vive feliz’, aplicado a niñas y niños de primaria.
“Lo he dicho aquí, el nivel de diabetes, hipertensión, obesidad de las niñas y los niños en México (…) ahí se ha visto que ha aumentado. El problema de obesidad y diabetes. Y está asociado en muchísimos estudios esencialmente al consumo excesivo de lo que llamamos comida chatarra y bebidas azucaradas”, subrayó.
La presidenta explicó que el incremento al impuesto -incluido en el paquete fiscal 2026- busca modificar patrones de consumo.
“¿Qué objetivo tiene? Pues que si destinabas 100 pesos a comprar bebidas azucaradas en un mes, pues esos 100 pesos los sigas destinando nada más que vas a comprar menos refrescos. Ese es el objetivo, consumir menos”, argumentó.
Sheinbaum insistió en que la medida tiene como objetivo “la salud de las y los mexicanos” ya que los efectos de una persona diabética en el mediano plazo “son gravísimos”.
Texto y foto: EFE / Agencias



