Denuncian un éxodo de indocumentados en Florida

La presidenta del Partido Demócrata de Florida, Nikki Fried, denunció el viernes que familias enteras de trabajadores indocumentados se van del estado, las “cosechas se pudren” sin recoger en el campo y faltan empleados en sectores esenciales a causa de la política migratoria del gobernador Ron DeSantis, candidato a las primarias republicanas.

Fried habló a la prensa frente al monumento “La antorcha de la amistad” de Miami, un símbolo de acogida a los inmigrantes, para exponer la razones por las que cree que la ley migratoria SB1718, que entrará en vigor el 1 de julio, va a causar un “desastre” peor al de leyes del mismo estilo promulgadas en Alabama y Arizona.

Los tres motores de Florida, agricultura, turismo y construcción, la “espina dorsal de la economía floridana”, van a sufrir a corto, medio y largo plazo a causa de la ley SB1718 por su dependencia de la mano de obra indocumentada, dijo. Según Fried, se calcula que viven en Florida, un estado de más de 21 millones de habitantes, casi 800,000 indocumentados.

Un 60 % de los trabajadores de la agricultura floridana está en situación migratoria irregular y, por tanto, están amenazados por la ley de DeSantis, que les condena a la deportación, impone fuertes multas a los empresarios que empleen a esos trabajadores sin papeles e incluso castiga a los familiares que los ayudan.

Acompañada de representantes de las comunidades venezolana, nicaragüense, cubana, colombiana y de otros países, Fried, la excomisionada (ministra) de Agricultura de Florida dijo que los efectos de la ley SB1718 se sienten por adelantado y exhortó a actuar no solo contra esas medidas “extremistas”, sino también y especialmente para evitar que DeSantis llegue a la Casa Blanca como pretende.

Desde el miércoles DeSantis es candidato oficial a las primarias republicanas y desde mucho antes ha dado muestras de que la inmigración irregular será el caballo de batalla de su campaña.

Texto y foto: Efe