Con el propósito de preservar el conocimiento ancestral de la milpa maya, la Secretaría de la Cultura y las Artes (Sedeculta) realizó en Yucatán un conversatorio con académicos, mujeres y niños.
El encuentro sirvió para reflexionar sobre la raíz del principal alimento del mexicano: el maíz.
Como parte de esta iniciativa, Sedeculta implementó un programa educativo en coordinación con la Secretaría General de Educación del Estado (Segey). Este programa busca que los estudiantes, desde nivel preescolar hasta secundaria, aprendan sobre la producción y el valor cultural no solo del maíz, sino también del chile habanero, el tomate, la cebolla y diversas frutas.
“Buscamos que la misma gente de Yucatán sepa de qué se trata este sistema agrícola y sepa la importancia que tiene, porque tiene que ver también con la calidad de la tierra, con sistemas que nos permiten de manera orgánica mantenerla”, indicó la titular de la Sedeculta, Patricia Martín Briceño.
Respuesta a problematica
La funcionaria explicó que, ante la problemática de salud muchas veces relacionada con la calidad de la alimentación—, se busca que la gente pueda cultivar sus propias verduras y frutas en casa. “Lo que queremos es que la gente conozca, sepa y que reviva la posibilidad en sus propias casas, en sus patios traseros que a veces están abandonados o se usan como basurero, para transformarlos en un punto de cultivo”, detalló.
Por su parte, la investigadora Olga Silvia Terán y Contreras explicó que el proyecto de llevar el conocimiento de la milpa maya a las escuelas, está “al parejo” con el Plan Nacional de Desarrollo. “Sobre todo con el eje general de desarrollo con bienestar y humanismo, y con el eje transversal derechos de la las comunidades indígenas y afroamericanas”. Sin embargo, enfatizó la necesidad de trabajar con cada alumno y cada familia para poder desarrollar esas pequeñas hortalizas.
Texto y foto: Alejandro Ruvalcaba
