La 4T logra la estatización del mineral, no la nacionalización, como aclara el ingeniero químico Humberto Reyes Montiel; ve difícil que el país se convierta en un fabricante de este elemento químico
En relación a la “nacionalización” del litio, un mineral que tiene un papel protagonista en las energías renovables, el ingeniero químico Humberto Reyes Montiel declaró que se tiene una buena cantidad de este elemento en el país, pero que se necesita de muchos recursos, que el Gobierno de México no tendría, para explotar esa riqueza.
De entrada, aclaró que lo realizado por el presidente Andrés Manuel López Obrador no fue “nacionalizar”, sino “estatizar”, ya que el litio es de la nación.
“Lo que ahora hizo es ponerle un candado para que México sea un fabricante del mineral, pero para que esto se concrete se requiere más dinero que una refinería o el Tren Maya. No vamos a ser productores de litio”, señaló Reyes Montiel.
De acuerdo con la Real Sociedad de Química de Reino Unido (RSC, por sus siglas en inglés), el litio es un metal que se encuentra, principalmente, en salmueras naturales, pozos petrolíferos, agua de mar y campos geotermales.
Es el metal más liviano conocido y cuenta con excelentes propiedades de conducción del calor y la electricidad.
Su apariencia es la de un metal suave y plateado, y reacciona vigorosamente al contacto con el agua.
El carbonato de litio es el producto con el mayor volumen de transacción a nivel internacional, de acuerdo con el Ministerio de Minería de Chile, el país con las mayores reservas de litio probadas en el mundo.
Desde hace unos años, el litio se ha implementado en el desarrollo de varios productos que se han extendido en el uso cotidiano de la mayoría de las personas en el planeta.
APLICACIONES DEL LITIO
Su aplicación más común, según la RSC, es en la fabricación de baterías para celulares, computadoras portátiles, cámaras digitales y vehículos eléctricos.
Sí, es muy probable que en este momento esté usted sosteniendo un poco de litio en sus manos.
El litio, en aleación con aluminio y magnesio, fortalece la resistencia de estos últimos dos elementos, al tiempo que los vuelve más ligeros. Las aleaciones de magnesio y litio se emplean, por ejemplo, en chalecos y protecciones antibalas. En tanto que las aleaciones de litio y aluminio tienen aplicaciones en la aeronáutica, la fabricación de bicicletas y el armado de trenes de alta velocidad.
Por si fuera poco, el óxido de litio se emplea para fabricar vasos y ciertos productos de cerámica, mientras que el cloruro de litio está presente en aires acondicionados y sistemas de secado industriales.
Una aplicación adicional y de suma importancia para el litio está en la industria farmacéutica. Dadas sus propiedades de conducción de señales eléctricas, este mineral está presente en algunos medicamentos para el tratamiento de trastornos maníaco-depresivos y episodio de manía.
TECNOLOGÍA ONEROSA PARA SU EXPLOTACIÓN
Reyes Montiel, quien también es fundador de la agrupación ambientalista Ciudadanos Hartos A. C., indicó que la inversión en tecnología para la explotación del litio no es barata.
-El litio que se encuentra en Sonora está en arcilla, data del Cuaternario, está en montañas y tiene que pasar procesos como precipitaciones y filtraciones– ejemplificó.
De acuerdo a un reportaje, el fundador de la empresa Mine Crons, José de Jesús Netzahualcoyotl Soots López, explicó que de una tonelada de arcilla que se extrae de una zona montañosa, se pueden obtener entre uno y cinco kilogramos de litio, aunque esto último es una estimación, ya que necesitan llegar hasta más de 100 metros debajo de la montaña.
Para llegar a esta zona, en Sonora, la empresa tuvo que construir una carretera de 40 kilómetros de tierra.
El litio se extrae a partir de tres tipos de depósitos: salmueras, pegmatitas y rocas sedimentarias. Los depósitos de salmuera representan alrededor del 66% de los recursos de litio a nivel mundial y se encuentran principalmente en las salinas de Chile, Argentina, China y el Tíbet.
Reyes Montiel indicó que lo más recomendable es dar concesiones. “El problema es que ahora no se darán concesiones, pero el país no tiene recursos para producirlo”, destacó.
Incluso el Gobierno federal tiene la intención de crear una empresa encargada de la producción del también conocido como el nuevo “oro blanco”. Hubo quienes hasta recomendaron el nombre de Amlitio para esa compañía, aunque el propio presidente de la república pidió que no se llamara así. No faltó quien asegurara que resultaría un “elefante blanco”, una empresa que casi nacería muerta.
Interrogado sobre la preocupación de la Cámara Minera de México (Camimex), respecto a que los cambios a la Ley Minera ponen en riesgo el empleo de más de 3 millones de familias que laboran en esta industria, el entrevistado consideró que es exagerada la cifra, ya que actualmente hay ocho empresas y cuando mucho se estaría hablando de 8 mil empleos.
“Tampoco es para exagerar, no veo señales de una expropiación para los que ya tienen concesiones, ya que se requieren muchos recursos. No es venir y decir: me quedo con tu carro a la fuerza, tiene que pagar. La 4T destinó 600 mil millones de Pemex para rescatarlo y no lo logra”, explicó.
Respecto al uso médico del litio, dijo que su explotación para ese fin es muy costosa, “se requiere de mucha inversión”.
De acuerdo al Servicio Geológico Mexicano, existen 10 empresas con 36 proyectos de litio en México y son las canadienses Organimax Nutient, Radius Gold, Infinite Lithium, One World Lithium y Zenith Minerals; las inglesas Alien Metals, Bacanora; las mexicanas Alejo Monsiváis y Litio Mex, y la española Sutti Mining. Respecto a que Bolivia, país con una de las mejores reservas de litio en el mundo, nacionalizó ese mineral hace 14 años, pero que hasta la fecha no ha logrado elaborar una batería, Reyes Montiel indicó que él ve más lo de la “nacionalización” en México como una estrategia política, para que no se hable tanto de su derrota en la Reforma Eléctrica.
Texto: Darwin Ail
Fotos e infografía: Agencias
