Editorial de Peninsular Punto Medio

El presidente de México o la llamada Cuarta Transformación todos los días dan noticias para comentar. Por ejemplo, en las últimas horas se ha mencionado mucho a Amlo y al Embajador de EU en nuestro país, Ken Salazar.

Todo ello porque el diario estadounidense The New York Times publicó un amplio reportaje en el que Salazar, en lugar de respaldar al INE, cuestionó si las elecciones del 2006 fueron fraudulentas.

Esa pregunta a “un alto funcionario electoral mexicano (Lorenzo Córdova)” tiene preocupado a empresarios y funcionarios estadounidenses, pues creen que el embajador está alineado al pensamiento del mandatario tabasqueño.

¿Qué tiene de malo? Nada, creemos, pero llama la atención que la amistad o buen ánimo entre Amlo y el representante estadounidense se pueda interpretar mal en la administración de Joe Biden y termine por perjudicar la política migratoria entre ambos países.

De hecho, López Obrador habló ayer de esa relación con Ken Salazar en su conferencia mañanera de ayer en Palacio Nacional:

“Sí, es mi amigo y es un hombre bueno, sensato, amigo del presidente Biden, un político muy responsable, de Colorado, que viene de abajo, de origen mexicano, además simpático, es muy amigo del presidente Biden y él es una gente buena y tenemos una extraordinaria relación.

“Y es muy buena persona y son muy buenas las relaciones, pero, lo voy a decir: los conservadores reaccionarios quisieran tener un ‘halcón’ de embajador. Ken Salazar es un hombre responsable, que defiende a su país. Estuvo conmigo casi una semana aquí recibiendo a 18 dueños de empresas estadounidenses, tratando caso por caso. Y es una gente de lo mejor, pero los del New York Times están con la idea de que Estados Unidos debe someternos, creen que somos colonia.

“No, México es un país independiente, libre, soberano, no se subordina a ninguna potencia”.