Editorial de Peninsular Punto Medio

El ramo restaurantero, sin duda alguna, fue uno de los sectores más golpeados de la actividad económica en Yucatán, tras los prácticamente dos años  que afectó la pandemia por el covid-19. 

No pocos establecimientos cerraron sus puertas y los que sobrevivieron tuvieron que hacer uso del ingenio y creatividad para poder sostenerse y, por ende, mantener las fuentes de empleo. 

Poco a poco, la industria de los alimentos condimentados ha ido en recuperación de manera paulatina, aunque tiene que lidiar con situaciones como la inflación y la falta de personal, ya que continúan existiendo vacantes en diferentes negocios. 

En ese contexto, Claudia González Góngora, quien ayer fue reelecta como presidenta de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac), convocó a a sus agremiados a recuperar el terreno perdido a raíz de pandemia. 

En su toma de protesta dijo que la formalidad de los negocios gastronómicos será una de las prioridades en este nuevo periodo, por lo que fortalecerán los mecanismos y alternativas que permitan profesionalizar a las y los trabajadores del sector. 

También dio a conocer que este año se organizará nuevamente eventos como el Mérida Restaurant Week, además de continuar con la presencia en la Feria Yucatán Xmatkuil y Yucatán Expone, así como otros eventos importantes en Mérida y el interior del estado, que suelen resultar un éxito.

“Sí, la industria restaurantera de Yucatán se vio muy afectada por la pandemia, pero si el 2022 fue de recuperación, este 2023 debe serlo al doble de crecimiento económico”, confió la reelecta dirigente.