Editorial de Peninsular Punto Medio

Como es lógico, el anuncio que hizo la Comisión de Elecciones de Morena sobre los 105 precandidatos a las alcaldías no dejó contentos a todos los liderazgos de ese partido en Yucatán.

Por ejemplo, en Motul, la ex delegada de la Secretaría de Relaciones Exteriores, Mariana Cruz Pool, tronó contra la decisión y acusó de traición a las autoridades de ese partido, pues la designación recayó en el actual secretario de la Comuna, José Carlos Ortega Jiménez, de extracción netamente priista, aunque el alcalde Roger Aguilar Arroyo haya sido expulsado de ese partido hace poco tiempo.

En su mensaje, dado a conocer en redes sociales, dejó entrever que había viajado a la Ciudad de México y lanzó el siguiente mensaje: ¿Quién dijo que esto terminó?

En contra, nos dicen, Ortega Jiménez y parte del Cabildo ya cumplen su segundo periodo como ediles en ese municipio, aunque hayan sido elegidos por otro partido.

Además, también junto al alcalde, fue denunciado penalmente por facturar dos veces una calle, lo que fue detectado por la Auditoría Superior del Estado y llevan un proceso jurídico y penal ante las autoridades judiciales.

Además, salvo una revisión más exhaustiva, en los 30 municipios más poblados de la entidad, Morena y sus aliados deben postular a 15 hombres y 15 mujeres, pero llama la atención que en los primeros 10, a excepción de Umán y Hunucmá, todos son varones.

Y hay que esperar lo que van a decir hoy un buen grupo de morenistas fundadores y militantes que se inscribieron a los procesos en varios municipios y se ven agredidos, no tomados en cuenta y humillados.

La cita es en un hotel del centro de Mérida y prometen hacer bastante ruido. Ya lo veremos.