Editorial de Peninsular Punto Medio

El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, volvió a hablar ayer sobre su futuro tras dejar la presidencia el 30 de septiembre: Vivirá en Palenque, Chiapas y su esposa Beatriz Gutiérrez Müller se quedará en la Ciudad de México junto con su hijo Jesús Ernesto.

López Obrador ya había hablado del tema desde el mes pasado, pero ahora ya la propia Beatriz lo ha confirmado, en el marco de la presentación del libro “Feminismo Silencioso”.

“Seguir la vida, los ciclos se cierran”, dijo la historiadora al afirmar que su dinámica diaria cambiará una vez que su esposo concluya su sexenio. Hay rumores de que la presidenta electa Claudia Sheinbaum Pardo la nombraría como titular de Cultura y las Artes.

Beatriz Gutiérrez dijo que, como ya se había anunciado, el presidente se retirará a su rancho de Palenque, por ser un lugar “que le gusta”, mientras que ella seguirá con su principal actividad profesional, como historiadora.

En la Mañanera de ayer, López Obrador dejó en claro que no se divorciará, pero, aunque viva en Palenque, buscará la manera de viajar a la Ciudad de México a visitar a su esposa e hijo.

“Voy a ver cómo le hago para trasladarme porque voy a estar viniendo para ver a mi compañera, Beatriz, que la amo mucho, que me ha ayudado, buenos, nada más con aguantarme ya”, dijo AMLO. 

El presidente volvió aclarar que tras el 1 de octubre entrará en un retiro para escribir libros sobre los pueblos indígenas, pero no dará entrevistas, ni conferencias magistrales, menos hablará en público y afirmó que nadie lo busque para que lo apoye para llegar a la presidenta Claudia Sheinbaum.

Más claro, ni el agua del río Nututún de Palenque y eso que es cristalina.