Todos los niños contaban lo mismo. Aquel nuevo alumno se comportaba fatal. Era presumido, y amigo de la bronca. Si no le gustaba algo insultaba. Incluso a veces pegó a algún pequeño.
Pablo deseó con todas sus fuerzas un cambio..
Y aquella noche un fantasmita travieso visitó los sueños del chico abusón. Con cuidado pero con dureza le hizo ver que su conducta era muy dañina, que hacía infelices a sus compañeros. Algunos hasta lloraban…
El crío cambió. Por la mañana no supo qué le había ocurrido. Pero se sintió diferente. No incordió a nadie. Pidió las cosas por favor. Prestó sus juguetes. Y en una semana tenía amigos y eran bien apreciado…
Pablo estaba contento…
Entonces su hermana Cristina empezò a tener problemas. Una niña de su escuela se burlaba de ella, también le cogía el almuerzo sin permiso. Hacía cosas feas, y Cristina lo estaba pasando mal…
Pablo deseó muy fuertemente un arreglo…
Y el fantasmita visitó en la noche a la niña y le ofreció un recorrido fantasmal a través de su vida. La obligó a verse robando, a verse riéndose de otras chicas… Y la pequeña se arrepintiò de su conducta…
Y desde entonces la escuela funcionó de maravilla. La niña dejó atrás su comportamiento negativo, fue todo sonrisas y amabilidad, y al punto hizo amigas y fue muy dichosa jugando con ellas…
Entonces al fantasmita le hirió otro fantasma…
Y Pablo, que poseía un don especial para detectar esas cosas, dibujó en la pizarra un montón de fantasmitas. Todos contentos. Jugando en un prado. Todos en buena armonía.
Y el fantasmita le regalò un libro de cuentos!
Dedicado a Luis, con todo cariño
Dedicado a cualquier niño que sufra bullying, hay que atajar el problema y solucionarlo…