El papa Francisco pidió que la política “no se olvide de los ancianos” ni deje que el mercado los relegue a “descartes improductivos” durante la misa celebrada por la Jornada Mundial de los Abuelos y los Ancianos.
“Estemos atentos, para que nuestras aglomeradas ciudades no se conviertan en ‘núcleos de soledad’, para que la política, que está llamada a proveer las necesidades de los más frágiles, no se olvide precisamente de los ancianos, dejando que el mercado los relegue a descartes improductivos”, urgió durante su homilía en la Basílica de San Pedro.
Francisco, de 86 años, es el impulsor de esta jornada que cada año trata de defender la atención a los ancianos desde la Iglesia Católica y por la que se celebra una misa anual en la Santa Sede.
En esta ocasión, llamó a “estar vigilantes para que en nuestras vidas y en nuestras familias no se margine a los ancianos”.
Texto y foto: Agencias