Pese a que no hubo una manifestación o marcha masiva a manera de protesta por la decisión del Ayuntamiento de Progreso de sacrificar a perros y gatos callejeros ante los recientes brotes de rabia en el estado, ciudadanos del puerto y de la ciudad de Mérida acordaron con el alcalde de este municipio, José Cortés Góngora, que los canes no sean exterminados, aunque esta decisión signifique desobedecer normas sanitarias a nivel federal.
En una reunión que inició poco después de las cuatro de la tarde en la sala de los retratos del palacio municipal, a los interesados se les informó que ahora los animales solo serían capturados, desparasitados y vacunados para que, en un lapso máximo de 48 horas, puedan ser adoptados, sin embargo, en caso de que esto no suceda, se les dejará nuevamente en la vía pública con un distintivo.
En su oportunidad, más de 20 personas, entre las que se encontraban representantes de agrupaciones defensoras de animales y rescatistas independientes, propusieron a la Comuna una serie de acciones que permitan reducir las posibilidades de enfermedades, sin poner en riesgo la vida de los perros o gatos.
Entre ellas está el realizar campañas en escuelas sobre los cuidados y responsabilidades de tener una mascota, sancionar a los dueños que no les apliquen las vacunas de rigor, así como castigar a quienes maltraten y abandonen a los animales.
De la misma manera se llamó a crear el registro público y canino de Progreso, con la finalidad de tener un mejor control en la materia, llevar a cabo de manera permanente campañas de esterilización en el puerto, activar una clínica veterinaria, y realizar el control de criaderos clandestinos.
El alcalde Cortés Góngora negó las acusaciones hacia su administración, señalada durante el pasado fin de semana de sacrificio sistemático de perros y gatos, y precisó que esto solo se efectuó en tres perros, uno de los cuales fue reportado con rabia, y otros dos que estuvieron en contacto con él.
En ese sentido, el primer edil recordó que la Secretaría de Salud de Yucatán (SSY) ha solicitado al Ayuntamiento de Progreso la aplicación de la Norma Oficial Mexicana (NOM) 011-SSA2-2011, que se utiliza para la prevención y control de la rabia humana y en perros y gatos.
Tras la reunión, los animalistas se reunieron a los bajos del palacio, donde indicaron a la prensa que por el momento el objetivo principal, que era evitar la muerte de callejeros inocentes, se logró.
No obstante, señalaron que todavía falta mucho por hacer en materia de prevención y sobre todo, en tenencia responsable de mascotas, ya que no esterilizar o aplicarles las vacunas necesarias contra la rabia termina pasando factura, generando sobrepoblación y brotes de diversas enfermedades.
– Acom