Alrededor de 50 enfermeros y enfermeras pidieron al gobernador, Joaquín Díaz Mena, su intervención para regresar a laborar al estado después de 8 meses que fueron enviados a trabajar a clínicas de Quintana Roo y Campeche.
Explicaron que son trabajadoras federales originarias de Valladolid y también de Mérida que, en su momento, fueron reubicados sin mayor aviso a centros de trabajo en los estados antes mencionados, lo cual consideran les causa mucho perjuicio ya que todos los días tienen que viajar o rentar vivienda en lugares como Tulum, lo que afecta su economía familiar.
Ante esta situación piden que una vez que se firme el convenio con el Imss – Bienestar sean regresados a sus centros de trabajo originales en el estado, ya que externaron su deseo de estar junto a sus familias.
Sin embargo, comentan que por estar debidamente capacitados, ahora los quieren absorber por los sistemas de salud de los estados antes mencionados.
“No es que nos paguen mal, pero sí tenemos algunos problemas de trato por no ser del estado en el que trabajamos”, comentó Antonio Bustamante.
Finalmente, las y los trabajadores de salud lograron entrevistarse con el gobernador Díaz Mena quien al finalizar su conferencia mañanera, escuchó a las puertas del Palacio de Gobierno sus planteamientos, y les ofreció un diálogo con el encargado de los asuntos del Imss – Bienestar en Yucatán y atender uno a uno los casos.
Texto y foto: Manuel Pool