MATÍAS ALMEYDA cumplió en presentarse el día 10 de junio a Chivas. Pero no era un día común, el de regreso de las vacaciones, sino todo lo contrario. Fuentes informaron que la reunión del argentino con los jugadores fue para despedirse mutuamente.
Todos los acontecimientos suscitados durante el periodo vacacional terminaron por romper lo que ya estaba desgastado entre el entrenador y el CEO de Chivas-Omnilife, José Luis Higuera. Hoy, Almeyda hará pública su decisión.
Todo comenzó cuando se nombró un director deportivo, la llegada de Francisco Gabriel de Anda no fue lo que esperaba Almeyda.
Después, le avisaron que vendría una consolidación financiera en la institución y eso significaba vender jugadores que el técnico sudamericano había pedido no salieran: Rodolfo Pizarro, Rodolfo Cota y Oswaldo Alanís.
Luego, la lista que dejó de refuerzos, ninguno fue contratado, solamente llegaron dos: Ángel Sepúlveda y Josecarlos Van Rankin, además del regreso de Mario de Luna, el portero, Raúl Gudiño, y Miguel Ponce.
La gota que derramó el vaso fue cuando, vía correo electrónico, la directiva de Chivas le pedía Almeyda que terminaran la relación laboral, es decir, ya no lo querían dentro de la institución rojiblanca. El técnico argentino estaba sorprendido por las formas, nunca imaginó salir así del Guadalajara.
Texto y foto: Agencias
