Yapingacho, bolón de plátano, ceviche de camarón y dulce de higos fueron los platillos que formaron parte de la muestra gastronómica de la Semana de Ecuador en Mérida, dentro de las actividades de Mérida, Capital Americana de la Cultura.
La chef Rosario Olmedo mencionó el orgullo que siente de promover la gastronomía ecuatoriana, resultado de la herencia hispana con la tradición andina.
“Somos un país muy chiquito. Los que estamos acá tenemos la obligación de dar conocer nuestra comida, que es una mezcla de la colonización española”, comentó.
La comida ecuatoriana es para los paladares aventureros. “Estamos aquí en Mérida para invitarles a que tengan esa aventura en el paladar, que degusten otra cosa distinta”, abundó.
Los productos utilizados de esa cocina son el maíz, plátano, arroz y papa. “Tenemos 700 clases de papa en los andes ecuatorianos, donde hace más frío”, abundó.
Por su geografía en Ecuador, “tenemos mucho camarón y mariscos”.
Días previos a comenzar la Semana Santa, los presentes degustaron un postre tradicional de la fecha, descrito por la chef Olmedo como un higo.
“Nos dimos el lujo de sacar el dulce al higo porque demora mucho tiempo (12 horas). Lo traje elaborado de Ciudad de México”, comentó.
De Los Andes ecuatorianos se probó el yapingacho, que lleva huevo y decorado de chorizo y aguacate; de la costa, un ceviche de camarón acompañado de canguil (palomitas), chiflos (maíz tostado) y tostadas de plátano.
Si bien existen muchas similitudes entre la cocina mexicana y ecuatoriana, en Mérida notó mayores semejanzas, comentó Rosario.
“Yo sé que el plátano lo consumen, el camarón se prepara de otra manera, yo no sé si las papas se consumen mucho”, abundó.– Irbin Flores Palomino
