La empresa de origen español, Iberdrola, venderá al Gobierno de México parte de los activos que tiene en el país, y los cuales tiene una capacidad instalada de ocho mil 539 megawatts y valor aproximado de seis mil millones de dólares.
Ante esto, el presidente Andrés Manuel López Obrador, aseguró que los complejos adquiridos serán operados por la Comisión Federal de Electricidad (CFE), por lo que pasará de generar el 39.6% de la electricidad en el país a 55.5%, por lo que se trata de una «nueva nacionalización».
En un comunicado enviado a sus inversionistas, Iberdrola detalló que la transacción sería por los complejos de ciclos combinados de gas Monterrey I y II, Altamira III y IV, Altamira V, Escobedo, La Laguna, Tamazunchale I, Baja California y Topolobampo II y III, así como el parque eólico terrestre La Venta III, que operan todos ellos bajo el régimen de Productores Independientes de Energía contratados con la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
A esto se sumarán los ciclos combinados de gas privados Monterrey III y IV, Tamazunchale II y Enertek.
