El Tren Maya, una de las obras insignia del Gobierno de Andrés Manuel López Obrador, lleva un retraso de al menos cinco meses debido a la burocracia existente y a fallas geológicas, según reveló ayer el director general del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), Rogelio Jiménez Pons.
“Esos trámites nos han complicado cinco meses de retrasos. El burocratismo de Semarnat, Sedatu y Conagua han retrasado el avance”, explicó a Efe Jiménez Pons, uno de los funcionarios de mayor confianza en la administración de López Obrador, durante una visita de trabajo a las obras del Tren Maya.
Otro factor de retraso se ha dado durante los trabajos en el subsuelo, pues se han tenido que nivelar varios tramos entre tres y seis metros, pues a consecuencia del cambio climático se detectaron irregularidades en los terrenos. El Tren Maya, que debería estar listo para finales de 2023, es un proyecto prioritario de AMLO con una inversión de alrededor de 200,000 millones de pesos.
Texto y foto: Efe
