“Padres fantasma”: 6 de cada 10 evaden pensión alimentaria

En México, 4.18 millones de padres no viven con sus hijos ni participan en su crianza, lo que representa el 9.3% de los hombres con hijos mayores de 15 años, según datos del INEGI. Esta ausencia deja a miles de hogares sostenidos únicamente por mujeres, quienes asumen tanto la carga económica como el trabajo doméstico y de cuidados. De hecho, las madres solas dedican en promedio 40 horas semanales a labores no remuneradas, frente a las 15.9 horas que destinan los hombres, una diferencia que equivale a una jornada laboral adicional.

El incumplimiento de las pensiones alimentarias agrava esta situación. Solo en el 42% de los divorcios donde se solicita manutención se obtiene una resolución favorable, y apenas 2 de cada 10 mujeres consideran este ingreso confiable debido a pagos irregulares o montos insuficientes. Frente a esto, la Ley Sabina y el Registro de Deudores Alimentarios Morosos (REDAM) buscan presionar a los padres ausentes con restricciones como la suspensión de trámites oficiales, prohibición de viajar al extranjero e incluso limitaciones para adquirir propiedades.

Aunque la Suprema Corte avaló la constitucionalidad de estas medidas, su aplicación sigue siendo desigual en los estados. Mientras algunas entidades han implementado el REDAM, otras no han adaptado sus leyes locales. Esto deja a muchas mujeres en un limbo legal, obligadas a recurrir a empleos informales o flexibles —con salarios bajos y sin prestaciones— para equilibrar el sustento económico y el cuidado de sus hijos.

Organizaciones civiles señalan que, más allá de las sanciones, se necesitan políticas públicas que alivien la carga de las madres solas, como guarderías accesibles y esquemas laborales con horarios realistas. Mientras tanto, la desigualdad en el reparto de responsabilidades sigue siendo una deuda pendiente en México.

Fuente: Cortesía