Los hombres de mar esperan que para Semana Santa el panorama mejore y también se pueda reconstruir la palapa afectada por el fuego
Los pescadores del mercado “7 de agosto” esperan que para Semana Santa repunten sus ventas porque por el mal tiempo se tienen bajas ventas, además de que aún no han iniciado los trabajos de rehabilitación de la palapa que se quemó.
Los comerciantes de pescados y mariscos de este lugar comentaron que desde hace varias semanas se quemó una de las palapas, por lo que han tenido problemas para vender sus productos, pese a que acondicionaron un espacio entre las palapas para realizar su venta de pescado de escama.
Pese a lo anterior, persiste la baja venta de especies marinas de escama, pese que hay disponibilidad del producto marino, además de que el panorama se dificulta con el clima inestable y los frentes fríos que aún quedan por llegar.
Dijeron que no se recuperaron de las bajas ventas que hubo en diciembre pasado, cuando se reduce el consumo de pescado y mariscos.
Señalaron que en otros años la venta de pescado en Campeche disminuía tras la Semana Santa, pero ahora, la situación es adversa, pero esperan que por lo menos haya un incremento en los productos de mar.
De hecho, agregaron que es común que con el paso de la Cuaresma se reporten bajas ventas de pescados y mariscos, pero apuestan que este año sea diferente.
Recordaron que el año pasado, para estos meses, las ventas de pescados y mariscos dejaron ganancias semanales de tan solo dos mil pesos.
Comentaron que, a pesar de las pocas ventas, tratan de mantener los precios accesibles para la gente que quiera comprar su pescado y mariscos. Sin embargo, dijeron que la gente no acude hasta el mercadito, en donde pueden encontrar productos más frescos y de buena calidad, más ahora que una palapa no está funcionando como debe ser.
Comentaron que con los mariscos hay menos pérdidas que en las especies de escama, porque es un producto que se puede mantener congelado.
Texto y foto: Agencia