Detrás de la suspensión del servicio de Rayos X y otros estudios clínicos en los hospitales del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Issste), hay una cadena de omisiones, expedientes extraviados y, más recientemente una decisión presidencial: no investigar.
El pasado martes 1 de noviembre, el presidente Andrés Manuel López Obrador, rechazó de manera tajante que la contratación mediante adjudicación directa de la empresa Imedic para la prestación del servicio, fuera a ser objeto de investigación y sostuvo que los cambios obedecen a una limpia en la institución por toda la corrupción del pasado.
En realidad, el asunto ya se estaba investigando y hay indicios de irregularidades.
El contrato a dicha empresa fue otorgado por Almendra Lorena Ortiz Genis, directora de Administración y Finanzas del Issste, a pesar de la oposición del director de la institución y la observación de diferentes irregularidades.
Hay documentos que evidencian más irregularidades en el caso. Para empezar, una carta de terminación contractual que enumera las omisiones administrativas y que auténticamente son el origen de las fallas en los servicios de radiología, endoscopía y anatomía patológica en el Issste
Un documento advierte que el contrato firmado para la prestación de los servicios concluye en nueve días naturales, es decir, el 30 de junio, y que se requiere de un tiempo de transición para evitar la ausencia del mismo.
Texto y foto: Agencias
