A pesar de que Donald Trump, presidente de Estados Unidos, firmó una orden ejecutiva que busca negar la ciudadanía a los hijos de inmigrantes indocumentados nacidos en territorio estadounidense y de algunos extranjeros con estadía legal en EE.UU., un juez federal bloqueó temporalmente la orden ejecutiva, lo que supone el primer revés en los planes del nuevo mandatario para reformar el sistema migratorio.
La orden del presidente Trump enfrenta grandes retos, pero también podría ser a largo plazo el primer impulso para cambiar la Constitución con ayuda de un Tribunal Supremo ultraconservador.
Por otro lado, sobre las redadas que lleva a cabo la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE), actualmente, estas están encaminadas a expulsar a los migrantes que tienen récords criminales en el vecino país del norte; sin embargo, inmigrantes sin récord criminal han caído en las redadas y deportaciones durante los primeros días de la Presidencia de Trump, lo que se prevé será el “daño colateral”, como lo llaman los mismos agentes migratorios estadounidenses y pese a que no son por ahora la prioridad.
Christopher Harris, que dirigió el sindicato de la Patrulla Fronteriza en la frontera de California por más de una década, explicó que los agentes de inmigración están llamando “daño colateral” a los migrantes que están siendo arrestados prácticamente “por encontrarse en el lugar y la hora equivocada”.
“Pasadas administraciones han tenido lo que se llama ‘prioridades’ de deportación enfocándose solamente en aquellos con récord criminal”, explicó Harris.
Sin embargo, considera que Trump terminó con estas prioridades tras firmar una orden ejecutiva en su primer día como presidente, aunque la administración enfatiza siempre que los primeros expulsados serán criminales.
Esto significa que cuando agentes de la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE) o de la Patrulla Fronteriza lleve a cabo una redada, un operativo o una detención buscando a una persona sospechosa de un crimen, interrogarán a todas las personas que se encuentren en el lugar o dentro de un auto.
“Arrestando por igual a personas con récord criminal o no”, agregó el exagente federal.
Texto y fotos: Bernardino Paz/ Agencias