Se alistan pescadores para la captura del mero

A poco menos de diez días de que finalice la veda del mero que empezó el 15 de febrero y concluye el 31 de este mes, pescadores, armadores y patrones de barcos podrán zarpar una vez que comience la captura de esa especie, por lo que desde ahora han comenzaron a alistar las embarcaciones, lo que permite reactivar la economía en el puerto.

Tras semanas de cobrar $350 pesos y recibir despensas que corresponden al apoyo económico del Programa de Empleo Temporal (PET) por la Veda del Mero, muchos ya se trasladan a los muelles de Yucalpetén para comenzar el avituallamiento de los pesqueros.

El armador José Francisco Novelo señaló que los barcos pesqueros invertirán en promedio $150,000 en avituallamiento. Llevarán 15 toneladas de hielo, tres mil kilos de carnada, que puede ser sardina, bonito o lizeta, y también cargarán unos 3,000 litros de diesel.

“A partir del sábado 1 de abril, cuando los barcos carguen hielo, se repartirán los anticipos. Cada pescador recibirá en promedio $3,000 como adelanto de pesca que servirá para que dejen en sus casas durante el tiempo que estarán de viaje”, explica el entrevistado.

Carlos Cruz Chimeo, patrón del barco “Pesquera IV”, dijo que todos los pescadores están desesperados, ya quieren salir de viaje, “ya no aguantan más tiempo en tierra pues no tienen dinero. La mayoría están endeudados y por eso les urge que se repartan los anticipos”.

Desde ayer hay movimiento en los muelles de Yucalpetén con los preparativos por la reanudación de la pesca de mero, ya alistan los alijos y equipos que se emplearán.

La derrama económica es millonaria, pues los 500 barcos dedicados a la escama avituallarán en el transcurso de la semana. Los primeros beneficiados con la derrama económica son los sardineros, que tienen asegurada la venta del producto que capturan frente las costas de Progreso y Chuburná.

Las lanchas sardineras ya no llegan a su base en los muelles de La Caleta, puesto que en Yucalpetén vendieron sus capturas de sardina especie que se usa como carnada. El kilo se vende a cinco pesos.

A partir del reinicio de la especie los barcos comenzarán a cargar diésel, los patrones y pescadores comprarán víveres, frutas, carnes, aves, huevos, refrescos, tortillas y pan francés, para el consumo en alta mar, con lo que se benefician los comercios del puerto.

 

José Luis Chavarría

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.