El representante del Colectivo Frente de Trabajadores de la Educación señala que las escuelas no cuentan con las condiciones para el regreso
Álvar Sosa Herrera, representante del Colectivo “Frente de Trabajadores de la Educación”, informó que al menos 142 docentes podrían ampararse para no asistir a dar clases en los planteles donde trabajan cuando se reactiven las clases presenciales, hasta que no existan las condiciones necesarias, tanto físicas como sanitarias.
Al enfatizar que están en contra de las clases presenciales y tratan de velar por la salud de sus familias e hijos, dijo que iniciarán un proceso de amparo ante la autoridad estatal.
“Estamos buscando la manera de ampararnos jurídicamente, el amparo es una denuncia que se interpone ante la autoridad educativa y durante el tiempo que el amparo está procediendo da oportunidad a los maestros de que al menos, mientras se da un resolutivo por parte de la autoridad judicial, queden protegidos para no presentarse de manera presencial”, expresó.
Sosa Herrera indicó que lucha para que se frenen las clases presenciales en el Estado y continuar de manera virtual. “Y sí se puede porque se viene haciendo desde el año pasado, a excepción de comunidades donde ahí iban los padres de familia y se llevaban cuadernillos y los maestros iban y dejaban estos para que los niños pudieran continuar con sus clases”, añadió.
También puntualizó que las escuelas no cuentan con las condiciones suficientes para haber activado las clases presenciales con un semáforo epidemiológico en naranja, donde se expone a mayores riesgos a los menores de edad de un contagio por COVID-19.
“Siguen insistiendo a los maestros que se presenten a pesar de los casos de coronavirus entre docentes que ya son bastantes. No tenemos un registro exacto porque la autoridad educativa está tratando de minimizar los contagios de los maestros. Retiran solo al maestro que está infectado y se quedan los demás en la escuela, pese a tener contacto con el docente que haya dado positivo”, contó.
Texto y foto: Agencia