Aunque era obvio que Melchor Eduardo C. A. acuchilló a su mujer con todas las agravantes, por confesar el delito sólo lo condenaron a siete años con cinco meses y 10 días de cárcel.
Atacó a su esposa María de Lourdes y a los papás de ésta en la casa de estos señores, ubicada en el fraccionamiento Fidel Velázquez.
En ese lugar estaba refugiada la mujer y sus hijos, luego que de 24 años de casada dejó a su esposo, ya que era víctima constante de violencia doméstica.
Este agresivo sujeto también fue condenado a pagar 40,300 pesos por concepto de reparación del daño, pero en abstracto y de forma genérica, por no haberse acreditado gasto alguno. Fue amonestado públicamente; le suspendieron sus derechos políticos; le negaron los beneficios sustitutivos, y se le prohibió acercarse a las víctimas e hijos una vez que cumpla con su sentencia, durante dos años.
Una juez de control aceptó este procedimiento abreviado, por los delitos de violencia familiar, tentativa de feminicidio y lesiones calificadas (2).
Una vida llena de violencia
La pareja estuvo casada durante 24 años y en ese tiempo procrearon tres hijos, pero ante la constante violencia que el ahora procesado ejercía sobre su mujer, ésta lo dejó y se fue a vivir a casa de sus padres, en el fraccionamiento anteriormente señalado.
El 8 de julio de 2018, a las 8 de la mañana, mientras María de Lourdes dormía el atacante entró a la vivienda y sin decir nada le clavó un cuchillo en la espalda y en varias partes del cuerpo.
La lastimó en la parte de atrás del cuello y a la altura de los senos, además que le produjo otras lesiones en una oreja y dedo.
Cuando se interpuso el señor Emiliano Tec recibió un cuchillazo en el brazo derecho. En su huida, el imputado empujó a su suegra.
Sin embargo, fue detenido cuadras después por elementos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) y puesto a disposición de las autoridades.
Texto y foto: Agencias
