El consultor internacional, Carlos Eduardo Guerrero Gutiérrez, aseveró que la situación del sistema de seguridad en México es un completo desastre y sólo algunos estados como Baja California y Yucatán mantienen estándares notables al respecto.
Guerrero Gutiérrez, fundador de la Consultoría Lantia, expresó que en la actualidad las condiciones de seguridad en el país no soy fáciles, incluso se elevó el número de policías por ciudadanos, pero eso no resolvió el clima de inseguridad, porque la policía en muchos de los casos protege a los delincuentes. Destacó que los últimos reportes señalan que en México hay 4 policías por cada mil habitantes, en tanto que en los países industrializados el número es de 3 por cada mil. A la par de esta situación, precisó que los índices de criminalidad no se reducen, en cambio la violencia continúa en ascenso, lo que establece que la estrategia pública no funciona.
La situación, expresó, pone de manifiesto que las condiciones establecidas no son las idóneas, las estrategias y enfoques que se intentan para detener los embates de la violencia contra la sociedad fracasaron y tras 4 años de gobierno del presidente Enrique Peña Nieto, es preciso decir que “entregará cuentas sangrientas al final de su mandato”. El especialista en temas de seguridad agregó que la constante entre los cuerpos de seguridad es el abuso de los derechos humanos, las agresiones y falta de sensibilidad con las personas lesionadas o dañadas por actos criminales.
Los índices de criminalidad, agregó, no se reducen como se anunció al principio de la administración federal, datos referentes establecen que el 92.6 de los delitos no se denuncian por la falta de confianza que hay hacia los cuerpos de seguridad o persecutorios de las condiciones legales, por ello, los índices de impunidad son igual muy altos.
Un estudio realizado por esta consultora en las 50 ciudades más conflictivas del país, entre las que destacan Acapulco, Cuernavaca, Toluca, son las que se encuentran entre las peor calificadas, con índices que superan los 11 delitos por cada 100 habitantes, de éstos 2 son hechos de sangre.–José Cortazar N.