Activistas adjudican la muerte de migrantes a las nuevas restricciones que implican una vigilancia cada vez más dura de Estados Unidos
Al menos 25 migrantes murieron ahogados en canales o en el desierto en las últimas cuatro semanas en la frontera ante crecientes operativos en México y restricciones en Estados Unidos, denunciaron activistas con base en reportes de la prensa y de la Patrulla Fronteriza.
Representantes de organizaciones civiles en Ciudad Juárez, límite norte de México, señalaron que, tan solo el miércoles, en el desierto estadounidense de El Paso, Texas, se reportaron cuatro cadáveres y uno más ahogado en un canal de la misma ciudad.
Asimismo, hace una semana, autoridades de ambos países colaboraron para recuperar el cuerpo de un hombre que falleció al caer desde el muro fronterizo hacia el lado estadounidense al oeste de Ciudad Juárez.
Y la Agencia Estatal de Investigación de Chihuahua encontró la semana pasada el cadáver de un migrante muerto por calor en el desierto mexicano.
El resto de los cuerpos se rescataron desde el 31 de mayo en el desierto de Nuevo México, bajo temperaturas que este mes han sobrepasado los 40 grados, según lo revelado por la Patrulla Fronteriza de El Paso.
El pastor Francisco González, director del albergue Vida y de la Red de Albergues Somos Uno por Juárez, aseveró que la muerte de todas estas personas es consecuencia de las nuevas restricciones migratorias, que implican una vigilancia cada vez más dura de Estados Unidos.
“Lo que está generando esto son los cambios en las leyes continuamente. Ahorita, de repente hay puntos de retención y luego, de repente, los quitan y eso hace que la gente siga buscando vías alternas para poder llegar”, indicó.
Operativos en México, restricciones en EUA
Las muertes ocurren durante la caída de más del 40 por ciento que reportó el miércoles el Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos en arrestos de migrantes en su frontera sur desde que el presidente, Joe Biden, firmó el 5 de junio la orden ejecutiva para restringir el asilo y agilizar las deportaciones.
Mientras que el mandatario mexicano, Andrés Manuel López Obrador, expuso que los arrestos de migrantes en la frontera de Estados Unidos con México han caído más del 72 por ciento, hasta 3 mil 479 el 25 de junio, desde los 12 mil 498 del 18 de diciembre, el punto más álgido del año pasado, gracias a la cooperación de su gobierno.
El pastor González alertó que entre más vigilancia haya son más vulnerables los migrantes, quienes antes llegaban en tren a Juárez, pero ahora buscan alternativas que los hacen más vulnerables al clima y grupos delictivos.
La Organización Internacional para las Migraciones declaró en septiembre pasado a la frontera entre México y Estados Unidos como “la ruta migratoria terrestre más peligrosa del mundo”, con más de 686 migrantes fallecidos o desaparecidos en 2022.
Texto y foto: EFE / Agencias