Ernesto Valverde demostró en su presentación como entrenador del Barcelona ser un tipo tranquilo pero seguro de sí mismo. No ocultó que éste es “el mayor reto que podía asumir”.
Su presentación ante los medios le descubrió la nueva realidad a la que se enfrenta, muy distinto como es el entorno al que tuvo en el Athletic de Bilbao y que dio la sensación de, no sobrepasándole, sí sorprenderle. Firme y a la vez cauto en su discurso, Valverde dio una clave indiscutible: “Queremos ganar todos los títulos posibles”.
“Sé que aquí hay una presión permanente por lograr resultados. Las dificultades existirán, pero son normales en lo que pueda ocurrir durante la temporada”, admitió el nuevo entrenador azulgrana, quien admitió que él se adaptará al Barça. “Es evidente que me tendré que adaptar a lo que es el juego del Barça; tener un gran juego colectivo, de centrocampistas, combinación… Sé que deberé hacerme a ello”, aseveró Valverde, quien le quitó algo de trascendencia al dibujo por sí mismo: “Los sistemas se mueven, se cambian, se varían… Lo que cuenta es que nosotros seamos quienes llevamos el juego”.
¿Líder? “Cada uno tiene su manera de expresarse. Lo que todos los entrenadores queremos, más allá de cómo nos expresemos, es que el equipo crezca y sea mejor”, solventó el técnico para no entrar en conflicto con el discurso más enérgico de Luis Enrique, pero dejando claro su papel en el vestuario.
No le gustó demasiado hablar del mercado y se excusó en la novedad de su llegada. “Acabo de aterrizar. He hablado con Robert hace poco y mi conocimiento de la plantilla es desde lejos. ¿Fichajes? El mercado del Athletic no es el del Barça pero yo confío en la parte deportiva del club y me informaré de todo pero tengo la sensación de que tenemos una excelente plantilla”.
Lo que sí admitió Valverde es que contará con la cantera del club, tomando especial atención con el Barça B: “Mi deseo es tener una relación fluida para ver qué jugadores pueden subir al primer equipo”, convino.
Comenzar con un pulso, por triplicado, con el Real Madrid, fue recibido con una sonrisa: “Vamos a empezar fuerte, tres Clásicos… Es un aliciente para esta pretemporada, con la Supercopa y empezando con el amistoso en Estados Unidos. La rivalidad convertirá la Supercopa en un pulso especial. Aumentan el reto de entrada y eso a mí me gusta”.
El nuevo entrenador azulgrana admitió que llega desde una realidad muy distinta, pero que lo hace con toda la ambición y confianza: “Vengo de un club muy especial para mí. El Athletic es el club de mi vida y aquella gente es como mi familia. Me costó tomar la decisión de no seguir pero aquí me gustaría generar esos mismos vínculos. Creo que esa es una de las claves para conseguir cosas”.
– ESPN
