La ciudad de Motul tiene muchos atractivos para presumir, sobre todo la sencillez y calidez de sus habitantes, siempre dispuestos a apoyar a propios y extraños, pero lamentablemente existen colonias no tan alejadas del centro que se encuentran en pésimas condiciones, olvidados por el alcalde Lucio Estrella Canul.
En esta ocasión el equipo de Peninsular Punto Medio fue invitado a conocer cómo viven los vecinos del Fraccionamiento Arboleda, ubicado a espaldas del cementerio municipal y que se caracteriza por tener en la calle 34 por 41 A, un parque abandonado, rodeado de terrenos baldíos, con juegos totalmente oxidados y corroídos, que son un riesgo para los infantes.
En la cancha de básquetbol se puede observar el óxido que cubre los tableros, mientras que los muros se encuentran grafiteados, advirtiendo la presencia de jóvenes que se reúnen en las cercanías para tomar y drogarse.
Vecinos, que piden guardar el anonimato, señalaron una vivienda ubicada frente a una agencia de cervezas como el lugar en el que se reúnen las personas para embriagarse y drogarse. Afirman que en este lugar vive un tipo apodado “El Güero”, quien se ha tomado la mala costumbre de tocar a las mujeres que pasan por la puerta de su predio e inclusive les levanta el vestido.
La cuestión, dijo una vecina, es que ya han denunciado al menos en dos ocasiones a este hombre y “la policía simple y sencillamente no interviene”.
En el fraccionamiento vecino, Villas La Hacienda, también viven situaciones similares.
En este lugar, la maleza cubre las banquetas y parte de las calles, y el Ayuntamiento no hace el trabajo correspondiente, permitiendo que abunden mosquitos y tarántulas, que se han convertido en el dolor de cabeza para los vecinos.
Existen terrenos que son parte de viviendas privadas, pero los dueños accedieron a permitir el paso para que los vecinos de la calle 41 B entre 30 y 32 no tengan que rodear calles para llegar a una arteria principal que conduce al mercado más cercano.
Sin embargo, la maleza ha cubierto el terreno dejando solamente una vereda. Aunque es corta la distancia a recorrer, por las noches, ante la falta de alumbrado, la zona se convierte en un riesgo sobre todo para las mujeres y menores de edad que cruzan para ir a una tiendita cercana.
Por si fuera poco el sitio se ha convertido en un tiradero clandestino. En el lugar se puede observar cenizas, que indica que recientemente se ha quemado basura en el lugar.
Todas estas problematicas han sido reportadas al alcalde Lucio Estrella. Y pese a que se le han enviado vídeos como evidencia, el edil se ha limitado a contestar que “no le compete el asunto”.
Ante la inacción de la Policía Municipal, los robos en el lugar están a la orden del día. Los delincuentes pueden huir fácilmente por los terrenos baldíos y callejones que comunican a los patios de las viviendas con calles principales.
Vecinos esperan que el alcalde Lucio Estrella “se ponga las pilas y acudan a recorrer las calles de estos dos fraccionamientos”, las cuales están llenas de baches
Los vecinos dicen se sienten desprotegidos y en peligro por la presencia de borrachos y drogadictos.
Texto y foto: Manuel Pool




