Yucatán puede avanzar, pese a desafíos

Es necesario diversificar los mercados y fortalecer la economía interna como un mecanismo de resiliencia, advierte especialista de la Uady; confianza en las obras y proyectos del Renacimiento Maya

En un entorno global marcado por tensiones e incertidumbres, Yucatán enfrenta el reto de mantener la estabilidad económica en 2025 y para lograrlo, Felipe Alonzo Solís, coordinador de Posgrado e Investigación de la Facultad  de Economía de la Universidad Autónoma de Yucatán (Uady), recomendó apoyar a los sectores locales mediante la incentivación del consumo interno, la protección al empleo y garantizar la continuidad de la inversión privada.

“El proteccionismo comercial, la reestructuración de las cadenas globales de suministro, la desaceleración económica, la persistente inflación y los altos costos de los alimentos, están configurando en este inicio de año un escenario complejo”, explicó el especialista.

Estos factores, sumados a conflictos geopolíticos en diversas regiones, han creado un entorno global que presenta enormes retos para economías como la de Yucatán, que es fuertemente dependiente del comercio internacional y, en particular, del mercado estadounidense.

“Las exportaciones de bienes clave, como artículos de joyería, ropa y productos groindustriales, encuentran en ese mercado su mayor destino. Sin embargo, el proteccionismo creciente y las posibles modificaciones en las políticas comerciales de Estados Unidos representan riesgos significativos para el estado”, advirtió.

Ante este panorama, el también Coordinador del Cuerpo Académico “Comercio y Relaciones Internacionales” de la Uady consideró necesario diversificar los mercados y fortalecer la economía interna como un mecanismo de resiliencia.

“Este año, el presupuesto público orientado a infraestructura tiene el potencial de ser una herramienta clave para apoyar el crecimiento económico inmediato y generar un impacto positivo en sectores clave”, destacó en especialista, quien subrayó que las inversiones estratégicas que conecten y fortalezcan la economía local pueden crear sinergias que impulsen la productividad y el empleo. 

Al respecto, el gobernador Joaquín Díaz Mena ha señalado que el 2025 viene con muchas esperanzas, especialmente porque inician los Proyectos del Renacimiento Maya como son la mejora y dragado del Puerto de Altura, con la construcción de una plataforma de 80 hectáreas; el ramal de carga del Tren Maya que saldrá del municipio de Umán rumbo a Progreso; el Anillo Metropolitano, los parques industriales con gas natural, y el impulso al campo yucateco.

Pero si bien estos proyectos ofrecen oportunidades importantes para conectar a Yucatán con  mercados nacionales e internacionales, también es momento de preguntarse si esta estrategia será suficiente para sostener el crecimiento económico en un año como 2025, donde el entorno global presenta tantos desafíos. ¿Cuál será, entonces, el verdadero motor de crecimiento para Yucatán este año?

Una respuesta puede encontrarse en el fortalecimiento de los sectores económicos locales. La industria del vestido, por ejemplo, enfrenta el reto de modernizarse y adaptarse a las demandas de un mercado global cambiante.

Por otro lado, la  agroindustria y los alimentos procesados tienen el potencial de crecer al diversificar su oferta y aprovechar las tendencias hacia productos sostenibles y de valor agregado. 

Además, el turismo, uno de los motores tradicionales de la economía yucateca, necesita evolucionar hacia un modelo más sostenible que fomente el turismo cultural, ecológico y gastronómico, reduciendo su estacionalidad.

Así es que para nuestro estado, el reto inmediato en 2025 es mantener la estabilidad económica a través de acciones concretas que estimulen el consumo interno, protejan los empleos y que fomenten la inversión privada local.

Garantizar condiciones que permitan a las empresas mantener sus operaciones y generar nuevas oportunidades de empleo debe ser prioritario. 

Adicionalmente, incentivar el consumo interno mediante programas de apoyo a las familias y pequeños negocios podría crear un ciclo virtuoso de crecimiento económico.

Por su parte, el gobierno también debe enfocarse en asegurar que la inversión local privada se vea fortalecida con medidas que reduzcan la carga regulatoria y brinden certidumbre económica. 

Estas estrategias de corto plazo no solo garantizarán un año más estable, sino que también sentarán las bases para un desarrollo económico más sostenible en el futuro.

En este contexto global complicado, Yucatán enfrenta el reto de maximizar los recursos disponibles para este año.

El enfoque debe estar en mantener el dinamismo económico a través del apoyo a los sectores locales, incentivando el consumo interno, protegiendo el empleo y garantizando la continuidad de la inversión privada. 

“Estas acciones inmediatas no solo permitirán enfrentar las dificultades del entorno global, sino que también crearán las condiciones necesarias para que Yucatán avance con resiliencia y fortaleza”, finalizó.

Texto y fotos: Manuel Pool