Ofrece Renán un gobierno responsable para todos por igual

Acabar con los privilegios, el egoísmo, la inseguridad, fueron algunos de los compromisos que asumió el presidente municipal de Mérida, Renán Barrera Concha, al rendir protesta al frente de su segundo período al frente del Ayuntamiento de Mérida para el trienio 2018-2021.

“Tenemos una visión de la Mérida que queremos y sabemos cuál es la tarea que necesitamos cumplir para impulsarla, tenemos que trabajar por una ciudad creativa, innovadora, capaz de promover el desarrollo igualitario, debemos luchar por un desarrollo sustentable y un ámbito que permita la convivencia social de mayor calidad”, dijo después de tomarle la protesta de rigor a los integrantes del nuevo cabildo en el marco de una sesión del mismo, en la que nombró al regidor Alejandro Ruz Castro como secretario municipal.

Ante la presencia del Gobernador del Estado, Rolando Zapata Bello, el munícipe recalcó que la unión y la creatividad serán los faros que guiarán el esfuerzo de Mérida por garantizar su futuro seguro.

“Haremos una alianza entre gobierno y ciudadanos que fomente el diálogo, la participación y el respeto al estado de derecho. Trabajaremos unidos para dar los resultados que se necesitan y ustedes con todo derecho esperan de nosotros, el Gobierno del Estado y el ayuntamiento tienen que sumar claramente sus esfuerzos por y para ustedes”, recalcó al hacer alusión a la próxima administración que encabezará el exalcalde Mauricio Vila Dosal, quien como invitado especial se encontraba en primera.

También hubo un mensaje para el presidente de la República electo, a quien Barrera Concha reiteró la disposición de seguir luchando por hacer realidad los cambios políticos que se necesitan y en los que cree con toda convicción.

“La gente votó harta de la prepotencia, el influyentismo, la deshonestidad y la ineficiencia, y desean, sobre todo, poner fin a la corrupción y a la impunidad en todos los órdenes de gobierno y en todos los aspectos de la vida social”, señaló.

“Esta exigencia de nuevas y efectivas formas de apoyo para ayudar a los que menos tienen es un mandato sagrado que tenemos que escuchar más allá de nuestras divergencias de criterio y filiación. Me declaro listo para trabajar por el bien de todos y todas”, subrayó.

Acerca del equipo que le acompañará en esta segunda ocasión en la que asume el cargo, indicó que seleccionó a un grupo de hombres y mujeres con experiencia probada en el servicio público, y recalcó que se proponen cambios en el organigrama municipal que respondan mejor a las demandas de austeridad, eficiencia y calidad de servicio.

“Mañana (por hoy), propondré al Cabildo una estructura basada en la correcta aplicación y diseño de políticas públicas y, por primera vez en la historia municipal, habrá una dependencia destinada al fortalecimiento del diálogo y la participación ciudadanas que ayuden a construir una nueva gobernanza”, detalló.

El primer edil se comprometió a vigilar personalmente el desempeño de los funcionarios que integren la administración y les advirtió que corregirá de inmediato aquellos comportamientos que no cumplan el código de ética y los mecanismos de control.

“En Mérida, la razón de ser del gobierno son los ciudadanos. Nadie más importante. Ningún funcionario se justifica sino en función del servicio a ellos”, destacó el alcalde, quien hizo especial alusión a los campesinos mayas que habitan con su lengua y costumbres la capital yucateca y sus comisarías, a quienes ofreció un gobierno que hará realidad cambios esperados.

“Amigos míos y de Mérida, les digo que todas las partes que componen mi ser, mi mente, mi corazón, las manos, mis piernas y mi voz estarán entregadas durante los próximos tres años a hacer el mejor trabajo de que yo sea capaz; de evitar el dolor evitable que seres humanos le infringen a otros; a hacerles nuevamente emocionarse con nuestra ciudad y a lograr cada minuto que la confianza que nos tienen para hacer un buen gobierno sea bien pagada. Estoy seguro que toda construcción que hagamos juntos cimentará el futuro seguro para todos. ¡Gracias a Dios por esta segunda oportunidad que asumo con la emoción más fuerte y limpia!”, concluyó.

Texto: Manuel Pool
Fotos: Juliana Sepúlveda

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