El alcalde de esa demarcación, Pedro Yah Sabido, asegura que se debe obtener una enseñanza del asesinato de la niña Ana Cristina G. C., acaecido la semana pasada, y evitar que se repita tan triste historia
Los habitantes del municipio de Tahdziú quieren darle la vuelta a la página que con mucho dolor se escribió con el asesinato de la menor de seis años, Ana Cristina G. C. “No queremos olvidar a esta niña, pero el mejor homenaje que podemos hacerle es obtener una enseñanza de lo ocurrido y evitar que se vuelva a repetir tan triste historia”, dijo su alcalde Pedro Yah Sabido, quien fue reelecto.
En entrevista con Punto Medio, el primer edil lamentó la manera en que se contó ese trágico suceso a través de redes sociales, donde inclusive se dijo que la madre del homicida estuvo involucrada para evitar que su vástago sea inculpado, lo que dio pie a que los vecinos exigieran la expulsión de toda la familia de la población.
Una vez que esto se logró, la furia de los habitantes se descargó contra la vivienda y la humilde tiendita de esa familia, que fue destrozada e incendiada. No hubo pillaje, a pesar de que Tahdziú es considerado el municipio más pobre de todo el estado.
–Es lamentable, porque estas personas que no tuvieron nada que ver. Se fueron a Peto y allá la gente tampoco quiso que se quedaran. Ahora no sabemos dónde están –dijo el alcalde, quien reconoció que en su momento temió que la turba se saliera de control.
–La cuestión es que nuestra comunidad no es un foco de violencia y lo que ocurrió no pasa todos los días. Afortunadamente somos un pueblo tranquilo, con gente amable, donde se puede caminar libremente por las calles –continuó el primer edil.
En efecto, esto es posible, pero en esa localidad, que cuenta con más de 6 mil habitantes, la mayoría, mayahablante; hay muchas calles que son brechas cubiertas de vegetación, como la que ahora luce con las tiras amarillas de la policía, donde ocurrió la violación y asesinato de la menor.
Tahdziú sufre de alta marginación, con calles sin el mantenimiento adecuado ni iluminación, razón por la que es inexplicable cómo la familia de la niña asesinada permitió que transite sola por un camino así.
Según el alcalde, ésta es una situación que los padres de familia deben de tener en cuenta, estar al pendiente de sus hijos y no desentenderse de ellos, confiando en que nada les va a pasar.
–La mamá (del asesino) vino días antes que ocurra esto a solicitar que se le apoye con una malla ciclónica, para evitar que su hijo ataque a sus gallinas, ya que al parecer tenía algún problema mental. Eso apenas lo supimos porque el joven no salía de su casa, es más ni siquiera lo conocía de vista –dijo el edil, quien comentó que, por esa situación, en su toma de protesta anunció que no se organizará el acostumbrado baile popular, a manera de duelo.
Y mientras tanto, la vida sigue en Tahdziú, donde la mayoría se dedica a las labores del campo, pero también al bordado de hilo contado, una actividad que requiere ser tomada en cuenta para recibir apoyo social, pues aunque mucho se ha hecho para reducir la brecha en ese municipio, aún hay grandes pendientes, especialmente en el ámbito de la salud, la alimentación y la salud.
Texto y fotos: Manuel Pool
