Si de repente tu teléfono celular se calienta más de lo habitual, se ralentiza o empiezan a llegar mensajes de servicios a los que no te has suscrito, especialmente después de haber instalado una aplicación, es probable que tu dispositivo haya sido hackeado.
“Si has instalado algo recientemente y desde entonces tu celular no se comporta como hasta el momento, es seguro que esa app está infectada”, advierten desde la Asociación de Internautas en un comunicado.
El malware, por lo general, se ejecuta en segundo plano y de forma constante. Esto hace, como explican desde la asociación, que el procesador funcione a máxima velocidad y se genere un sobrecalentamiento. Además, el rendimiento del móvil se reduce y la batería se consume antes de lo habitual. Estos indicadores sirven para alertar de que algo no va bien en el dispositivo, sobre todo si con el uso habitual del smartphone esto no ocurre.
Otros indicadores de malware pasan por la recepción de mensajes sospechosos de servicios que no conoces, en tanto que muchos de estos programas maliciosos cogen el número de teléfono del móvil y lo suscriben sin permiso a servicios ‘premium’. Es posible que esté acompañado de una factura abultada a final de mes, como avisan desde la asociación.
Otra posibilidad es que tus contactos estén recibiendo mensajes extraños desde tu smartphone sin que lo sepas, o que en redes sociales se hayan publicado contenidos que tú no has compartido.
Texto y foto: El Universal