Si Will Smith pudiera hablar con su yo de 23 años, más que darle consejos, se los pediría . En aquella época en que iniciaba su carrera era salvaje y agresivo, señala, pero también ingenuo.
“Y hay un poder en ser ingenuo que en realidad me gustaría traerlo de vuelta a mi vida ahora”, dice.
“En el último par de años me estuve sintiendo atrapado por el éxito que había tenido, y tomé decisiones para tratar de proteger a Will Smith, por eso en mi cumpleaños 50 (el año pasado) brinqué de un paracaídas sobre el Gran Cañón tratando de traer de vuelta ese espacio libre de miedo”, relata.
De cierta forma, el actor sí se puso en contacto con su versión más joven. Como parte de su preparación para la cinta Proyecto géminis, el director Ang Lee trajo de vuelta algunos de sus recuerdos.
En la película de Paramount Pictures y Skydance, que estrena el próximo 11 de octubre, Smith interpreta a dos personajes: uno es Henry Brogan, un asesino veterano; el otro es Junior, su clon de 23 años con quien tendrá que enfrentarse.
Para separar a los dos personajes y lograr esa inocencia que requería Junior, antes de que comenzaran con las grabaciones, director y actor se sentaron a ver escenas de El príncipe del rap, Seis grados de separación, Bad boys, El día de la independencia y Hombres de negro.
“De cierta forma creamos un lenguaje de mis personajes viejos. Es divertido porque antes de que aprendes a actuar hay algo muy poderoso que tienes de no saberlo y es muy difícil recapturar ese desconocimiento. Encontramos estos momentos en mis primeros trabajos y se sentía como aprender a actuar mal, regresar a eso”, relató el actor durante la presentación a prensa internacional realizada el viernes en el YouTube Space en Los Ángeles.
Además del trabajo de Smith, separar ambos personajes interpretados por el mismo actor requirió de efectos visuales para crear por computadora la versión joven de Smith. “No es que hayan puesto mi cara y la hayan difuminado para lucir joven, es 100% digital”, aclara.
“Para los actores jóvenes es fácil interpretar a alguien más viejo, pero para alguien más viejo es difícil ser alguien más joven. Una vez que sabes ciertas cosas, están en tus ojos en las células”.
El elenco de la cinta lo encabezan Mary Elizabeth Winstead, como una detective que se une al personaje de Smith; Clive Owen, en el antagónico; y Benedict Wong como uno de los mejores amigos de Smith. La película fue rodada en 120 cuadros por segundo utilizando efectos nunca antes empleados por lo que al verla en 3D la experiencia hace que el público se sienta dentro del lugar. Contó con locaciones como Georgia, Cartagena en Colombia y Budapest, Hungría.
Ahora que ha cumplido 51 años, el pasado 25 de septiembre, el protagonista de Soy leyenda, más que ver una transición en sus personajes, la ve en su propia vida.
“Estoy viendo mi rol en el mundo como un rol de servicio. En mis días de juventud era ambicioso, quería ganar, quería ser el principal y ahora que he llegado a esta posición la pregunta principal que me hago a mí mismo, si pudiera hacer cualquier cosa, sería cómo usar ese servicio con la humanidad”.
Para el actor, una de las enseñanzas del filme que lo llevaron a aceptar formar parte del proyecto es esa lucha con uno mismo.
“Amé la idea filosófica de que nosotros mismos plantamos las semillas de nuestra destrucción, de que nosotros somos nuestro peor enemigo. Hacemos elecciones, tomamos decisiones en nuestras vidas y no podemos culpar a nadie más de ello. Creo que es una forma inteligente y creativa de decir que somos los arquitectos de nuestro último ascenso o caída”.
Texto y fotos: El Universal