¿Se atreverá el presidente Andrés Manuel López Obrador a llevar a la cárcel su antecesor Enrique Peña Nieto? Es una gran interrogante que nos planteamos cuando suenan las últimas noticias relacionadas a la investigación que la Unidad de Inteligencia Financiera está realizando.
Según medios nacionales, están investigando las cuentas de Enrique Peña Nieto en más de cincuenta bancos de todo el mundo, y no sólo las de él, sino la de sus hijos e incluso las de su exesposa Angélica Rivera, en busca de algún movimiento turbio por parte del exmandatario y toda su prole.
Sin embargo, luego en “la Mañanera”, el presidente López Obrador negó que existiera alguna investigación sobre Peña Nieto, ya que para eso se necesitaría una consulta pública para juzgar a expresidente. Pero todo sabemos que ese no es un obstáculo insalvable para la 4T, que ha librado otros escollos con este recurso.
Se trataría de un proceso histórico. Sería la investigación más importante de la historia moderna, nada más y nada menos, la primera en la historia moderna en la que se emprendiera alguna acción legal contra un expresidente de la república.
Sí, es muy posible que esto se trate de un ardid para levantar sus bonos, pero no deja de ser una posibilidad insólita.
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