La salud, la educación, la reactivación económica y la sostenibilidad son los ejes del proyecto del aspirante del PAN
“El 13 de marzo del año pasado nació mi hija, Ana. Ese día se reportó el primer caso de COVID-19 en Yucatán. Al día siguiente, cuando vi las noticias y sentíamos que el mundo se nos venía abajo, ahí fui egoísta y pensé ¿en qué clase de mundo vivirá mi hija? Entonces decidí que era momento de tomar cartas en el asunto, de meter las manos al fuego y accionar, porque quiero que mi hija crezca en un mejor Yucatán y en un mejor país”, explicó Erik Rihani, candidato del Partido Acción Nacional a diputado local por el Distrito IX.
Durante reuniones vecinales y caminatas que ha realizado en su campaña a lo largo y ancho de los 12 municipios que conforman el distrito, el aspirante blanquiazul ha señalado que a partir de la pandemia es cuando nace la inquietud de hacer más activismo y que su mayor motivación para trabajar por Yucatán son su hija y su esposa.
El candidato panista también ha recalcado que “no basta con hacer las cosas bien, sino que hay que pensar en hacer el bien”. La salud, la educación, la reactivación económica y la sostenibilidad son los ejes que trazan el plan de trabajo que Erik Rihani tiene para los próximos tres años después de ganar la elección el próximo 6 de junio.
“Tenemos muchas cosas que hacer en el noveno distrito. En la reactivación económica, por ejemplo, contamos con la pesca en la costa, henequeneros en Motul, hay muchos apicultores y hasta ganaderos. Además de la gran cantidad de microempresarios que se vieron en la necesidad de emprender tras perder su empleo o ver afectados sus ingresos por la pandemia”, señaló el joven empresario progreseño.
Agregó que es necesario ampliar los programas que ya existen de capacitación y acompañamiento para el crecimiento de las micro y pequeñas empresas. Por otra parte, la primera petición que los habitantes de los municipios le hacen a Erik Rihani es que no los abandone después de ganar la elección, que vuelva a visitarlos y no se olvide de ellos.
“Ya lo he dicho antes y lo voy a repetir, yo voy a volver. Ese fue el primer compromiso que hice y lo sostengo. Seguiré visitando los 12 municipios del distrito nueve después de ganar la elección porque ahí es cuando de verdad inicia la chamba y tenemos tres años para trabajar con y para los habitantes”, detalló el candidato panista.
En el apartado de salud, el panista indicó que también buscará trabajar en la medicina preventiva para que personas con enfermedades como hipertensión o diabetes, así como mujeres embarazadas puedan tener acceso a servicios médicos como consultas y ultrasonidos, pero sin riesgo a contagiarse de COVID-19.
De igual modo, Erik Rihani ha externado su preocupación por el cuidado del medio ambiente debido a que Yucatán cuenta con un ecosistema hermoso y completo pero a su vez es muy frágil.
“Yucatán también tiene una bendición: la del agua. Es muy fácil tener acceso a ella con un pozo de poca profundidad, pero eso también la hace muy vulnerable y debemos ser muy cuidadoso con el manejo del agua que tenemos e implementar medidas que nos ayuden a nosotros y a las próximas generaciones”, finalizó.
Cabe recordar que Erik Rihani es egresado como ingeniero industrial del Instituto Tecnológico de Mérida y cuenta con una maestría en administración financiera por la Universidad Anáhuac Mayab.
Es hijo de Roberto Rihani Vales (+) y Dolores González Pacheco, y hermano de Ana Laura Rihani González (+). Está casado con Alexis Abimerhi Douglas, con quien tiene a su hija, Ana.
Como parte de su experiencia en el servicio público, Erik Rihani fue subdelegado de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) en Yucatán. Fue titular de la Dirección de Recolección de Residuos y Sólidos del Municipio de Progreso (Prolimpia), donde creó un sistema eficiente para resolver la problemática de la basura que por más de 20 años se padeció en el municipio. Por último, colaboró en la Dirección de Ordenamiento Pesquero de la Secretaría de Pesca y Acuacultura Sustentable (Sepasy), donde trabajó para impulsar el desarrollo de este sector en Yucatán.
Texto y foto: Cortesía