La doctora Gabriela Canché, coordinadora auxiliar de Atención Médica, señala que tiene el método para aliviar el dolor
El Instituto Mexicano del Seguro Social (Imss) en Yucatán orienta sobre la artritis reumatoide y los tratamientos que brinda para detener o retrasar los daños en las articulaciones y poder mejorar de manera considerable la calidad de vida de las y los pacientes.
La doctora Gabriela Canché Briceño, coordinadora auxiliar de Atención Médica, explicó que la artritis reumatoide es un trastorno inflamatorio crónico que afecta las articulaciones, causa una dolorosa hinchazón y puede generar desgaste óseo o deformidad de las articulaciones. Con mayor frecuencia se registra en las rodillas, columna, dedos de las manos y de los pies.
En la actualidad no existe una cura definitiva para este padecimiento, sin embargo, los métodos que se otorgan en el Instituto se centran en aliviar el dolor, reducir la inflamación y evitar otras complicaciones.
Las personas más propensas a desarrollar artritis reumatoide son las de mayor edad, con sobrepeso, quienes tienen antecedentes familiares de esta enfermedad y aquellas que la presentan como secuela de otros problemas de salud; además de que es más común en mujeres.
Algunos síntomas que pudieran registrarse son: articulaciones sensibles e hinchadas, rigidez articular que generalmente empeora por las mañanas y después de inactividad, cansancio y pérdida del apetito; abultamientos duros -llamados nódulos reumatoides- en las zonas de roce de la piel, como los codos, el dorso de los dedos de las manos y de los pies.
De igual forma, con el tiempo se puede producir una deformidad debido al deterioro progresivo de las articulaciones afectadas.
Cabe señalar que la aparición de los síntomas no es muy clara durante su inicio, por lo tanto, cuando se sospeche de que se pueda padecer esta patología es importante acudir a su médico familiar para que se determine cuál es el tratamiento más eficaz, ya que un diagnóstico temprano puede ayudar a una mejor evolución.
Si no se otorga un seguimiento médico pertinente puede aumentar el riesgo de desarrollar otras complicaciones como osteoporosis, deformación incapacitante de extremidades o dolor excesivo. Cuando se padece de artritis reumatoide es importante no suspender los tratamientos médicos.
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