El primero ocurre en un conocido supermercado, el cual es causado por dos menores de edad; el segundo siniestro sucede en un vehículo
El pasado domingo se registraron un par de incendios en el puerto de Progreso, uno sucedió al interior de un supermercado, mientras que otro se suscitó en un vehículo en la carretera Mérida-Progreso.
El primero sucedió en el supermercado Bodega Aurrera ubicado a la entrada del puerto, el cual según dieron a conocer elementos de la Policía Municipal, fue causado por menores de edad.
Tras darse el incendio, elementos de la policía en conjunto con la SSP acudieron de manera inmediata para verificar la situación y ayudar con la evacuación de la gente y evitar algún accidente.
Algunos elementos a cargo del comandante, Emilio Caamal, hablaron con el gerente de este supermercado para verificar el origen de los hechos, y revisando las cámaras de videovigilancia, se observó a 2 niños salir corriendo del lugar de los hechos, asimismo, testigos que se encontraban en esa área, afirmaron ver a los menores, con el uso de bombitas, quedando como sospechosos.
Debido a esto, se descartaron los rumores de las redes sociales sobre un presunto intento de robo.
Por este motivo, se les informó a los padres de familia que vigilen a sus hijos, al igual que se les informó sobre las consecuencias del uso de juegos pirotécnicos y la gravedad de asuntos que pueden ocurrir por su uso. El gerente de este supermercado destacó que este suceso será procesado como intento de incendio, daño a propiedad ajena y otros delitos de tipo penal.
Más allá del susto, se informó que afortunadamente no hubo ningún herido y solo fueron pérdidas materiales.
Por otro lado, durante la noche se dio el incendio de una camioneta Voyager en la carretera Mérida-Progreso, altura del kilómetro 26 + 500. El siniestro fue atendido por elementos de la SSP y de la base de bomberos. Al parecer el fuego se originó por un corto circuito y se consumió gran parte del frente del vehículo antes de que las llamas fueran extinguidas por bomberos, sin embargo, afortunadamente tampoco hubo heridos.
Texto y foto: David Correa