La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), realiza un estudio de un producto o servicio, en esta ocasión se analizaron 20 productos lácteos, los cuales se venden como leche y los resultados no son lo que promocionan en el envase.
En dicho estudio, se calificaron distintos aspectos, como la cantidad de proteína, tipo de grasa, densidad, lactosa, aporte calórico, sólidos no grasos y contenido neto, también el etiquetado.
Según el estudio, la marca LALA 100 Fresca, no cumplió con este estudio, pues se vende como “leche fresca, baja en grasa o con densidades mínimas”, pero en realidad no cumple con lo que promete.
La versión de un litro, “LALA 100 Fresará sin lactosa LOW-CARB -30% Light, semi descremada, deslactosada, ultrafiltrada, pasteurizada, adicionada con vitaminas A y D, reducida en grasas”, no cuenta con el mínimo de sólidos no grasos y la densidad mínima para una leche deslactosada.
Estas fueron dos de las 20 estudiadas que no pasaron la prueba, pero si quieres leer más sobre este estudio, puedes encontrarlo en la Revista del Consumidor de Junio.