Activistas recuerdan a la mujer fuerte que fue Sandra Peniche, y que contagiaba generosidad

Colectivos, asociaciones, activistas y hasta representantes de la vida pública se congregaron en el centro cultural “Amaro”, para realizar un homenaje póstumo a la doctora Sandra Peniche, promotora de los derechos sexuales reproductivos y fundadora de la primera clínica para la interrupción del embarazo seguro en Latinoamérica, y quien falleció el pasado 14 de diciembre, a los 67 años de edad.

Con emotivas palabras, los participantes recordaron anécdotas con Sandra Peniche, a quien describieron como “una mujer fuerte” que marcó la vida de muchas personas.

La activista y defensora, Cirse López, recordó de una manera emotiva que la doctora la acogió, defendió y la hizo fuerte, sacando lo mejor de ella.

“Su fortaleza la contagió siempre y eso me permite también seguir y construir lo que hemos hecho juntas”, comentó.

Reconoció que, de igual manera, tuvo una capacidad de escucha y una fuerza interna que contagiaba, con sabiduría y generosidad.

El doctor y activista Douglas Canul reconoció que fue, precisamente, gracias a Sandra que reconoció en sí mismo comportamientos machistas.

“Lo mínimo que puede hacer es señalar las violencias misóginas para re educar y aprender entre hombres, especialmente en la medicina, para evitar la violencia obstétrica. Es un pequeñito granito de arena de tantas cosas que aprendí de Sandra”, indicó.

“Como el mar que ella tan- to quería, con olas tranquilas, pero fuertes,” así la recuerda su amiga Pilar Sánchez: “fuerte e intensa y poderosa”.

“Era una escucha permanente, como una playa en donde es posible reposar y refrescarse gracias a sus ideas. Ella tenía permanentemente en su mente una crítica, era siempre propositiva, nunca la escuché destruyendo, no; siempre era para edificar”, señalaron.

La doctora feminista siempre será considerada la abuela del activismo yucateco, la heredera de las feministas de 1916. Que la historia de Yucatán, los avances en anticoncepción y planificación, las libertades sexuales, el feminismo nacional, el movimiento Lgbt+, se le deben a ella.

La doctora Sandra Peniche también fue impulsora de la Ley 3 de 3 para que ningún agresor de mujeres ocupe puesto de poder ni acceda a candidaturas.

Tras su deceso, familiares y amigos informaron que la doctora falleció tras una larga dolencia.

Su trayectoria

Nacida el 23 de mayo en Mérida, Yucatán, Sandra Peniche estudió medicina en el Instituto Mexicano de Sexología y abrió Servicios Humanitarios en Salud Sexual y Reproductiva (Shssr), la primera clínica en Latinoamérica que anunció que atendería a todas las mujeres que lo necesitaran.

Fue presidenta de la Unidad de Atención psicológica, sexológica y educativa para el creci- miento personal (Unasse).

Participó en la Cuarta Conferencia Mundial sobre la Mujer en Beijing, China, donde se reconoció la salud sexual y reproductiva como un estado de “bienestar físico, mental y social, y no de mera ausencia de enfermedades o dolencias”.

Fue una activista que ejerció la medicina desde un enfoque feminista y con perspectiva de género que luchó hasta su fallecimiento por los derechos de las mujeres pese a las injusticias y amenazas que vivió.